Por Jesús Muñoz Caballero
La mítica formación francesa de Old School Death Metal MERCYLESS vuelve a a la actualidad con un nuevo trabajo bajo el brazo. Activos desde 1987 nos regalaron el que hasta la fecha es su sexto álbum de estudio «Pathetic Divinity». Editado el 7 de octubre de 2016 vía Kaotoxin Records es el protagonista de estas moribundas esquelas.
El line up es el siguiente: Max Otero (voz y guitarra. Ex DAY OFF SIN), Matthieu Merklen (bajo. Ex DAWOHL), Laurent Michalak (batería. Miembro a su vez de JIZZLOBBER, ex COVERAGE, ex HOLLOW CORP, ex DAY OFF SIN, ex SIX GRAMMES EIGHT), Gautier Merklen (guitarra. Ex DEHUMANIZE).
En este nuevo asalto el combo nos brinda un trabajo sin compasión, donde todo aquel que decida oírlo vivirá un choque mortal contra un infranqueable muro sónico. Tan oscuro como veloz e intenso, estos tipos nos dan una buena muestra de como debe de sonar este género musical. Una vez más la vieja guardia demuestra con creces que está muy viva, reventando cráneos de posers a diestro y siniestro con lo aquí expuesto.
La producción tiene el punto preciso de crudeza y nitidez. Suenan reales y sanguinarios, sabiendo perfectamente que nos encontramos en 2016. Da gusto encontrarse con algo así. El artwork es aterrador, cumpliendo perfectamente con su cometido, siendo idóneo para hacerte una idea de lo que se te viene encima.
Los riffs son mórbidos y violentos a más no poder, arrasando cual vendaval con todo lo que se les pone por delante. El escaparate de los susodichos por canción es realmente loable. Nos los topamos fluidos, con melodías malévolas, sin olvidar los instantes de pesadez. Todo ello lo aderezan con afiladísimos solos de guitarra que te degollaran sin compasión alguna. Las voces se basan en potentísimos growls como era de esperar. La batería está muy bien equilibrada, ofreciendo unos constantes cambalaches de dirección. Up y mid tempos conviven en perfecta armonía junto con sanguinarios blast beats.
Personalmente destacaría los siguientes tracks: «Pathetic Divinity», «My Name Is Legion» y «Eucharistic Adoration» por los siguientes motivos: «Pathetic Divinity», es la tonada más maléfica e insidiosa de todas. Sus continuos cambios de camino te dejarán con un muy buen sabor de boca. «My Name Is Legion» te arrancará el alma con el brutal tapping que adjuntan. Quedas advertido. «Eucharistic Adoration» es un tema donde la celeridad es lo que prima. Estarás ante toda una espiral de caos y destrucción. Así da gusto hermano.
Verdadero «metal muerto» para auténticos seguidores de este género musical. De obligada escucha si disfrutas de este tipo de sonoridades.
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