Por Carlos Bermejo
“Punishment For The Infidels” es el larga duración debut del combo italiano formado en 2007 DOWNFALL, los cuales ya editaron dos trabajos en 2011 y 2014, ambos en formato EP. Este nuevo trabajo discográfico verá la luz el próximo diecisiete de marzo a través del sello Memorial Records.
El álbum está compuesto por once cortes repartidos en algo más de treinta y ocho minutos en el que el cuarteto de Ancona nos expone un Thrash Metal cargado de rabia y agresividad en el que combinan a la perfección la vieja escuela con la vertiente más moderna del género, al que además no le falta su dosis de Crossover, de Groove, e incluso alguna pincelada de Hardcore, esto último motivado principalmente por la voz de Federico Natalini.
Así pues ya desde el inicio del disco con el corte “The Torture” la banda deja clara sus intenciones, tras una breve intro insertada en la pista comienza la devastación, ellos tienen claro una cosa y es que no piensan dejar prisioneros, y no sólo lo hacen con esta canción, sino que las dos siguientes “Pleasure for Murder” y “Corrupted in Black” van a conseguir dejarte exhausto, imaginad una mezcla de SLAYER, SEPULTURA (del Chaos A.D.) y D.R.I., pues eso mismo.
En el siguiente trio de temas “God’s Hand”, “Slaughterism” y “Misanthropic Solution” nos muestran tres excelentes composiciones donde entrelazan perfectamente las partes vertiginosas con la fases machaconas. Algo parecido ocurre en “Feeling the Beast” la cual ya fue incluida en anterior EP pero en este caso las fases más pesadas son prácticamente testimoniales. Lo que está claro es que esta parte central del álbum no hace otra cosa que aumentar la calidad del disco en su globalidad ya que consiguen que no se haga monótono, que no sea todo el tiempo velocidad sin más.
A continuación llega “Abyss”, posiblemente uno de los cortes del disco, un tema en el que mezclan el Thrash más agresivo con el Groove más exquisito, vamos que podría estar incluida en el disco de SEPULTURA al que antes hacía mención y no desentonaría para nada. “Last Prophecy” es un corte instrumental a excepción de alguna voz en off de un minuto y medio de duración el cual da paso a “Mass Homicide”, para mí el corte del disco, poco más de dos minutos de auténtica locura, pero ojo, perfectamente estructurada, con esta canción es imposible mantenerse impasible a menos que no tengas sangre en las venas.
Para cerrar el disco encontramos otro de los temas destacados de este trabajo discográfico, “Machination of Revolution” que como ocurriera con la pista número siete también ha sido rescatada de su EP anterior y es sin duda un excelente colofón a un trabajo que para mí acaba de entrar en el top 10 de este año.
