Críticas - Clásicos

METALLICA (USA) «Ride The Lightning» (Megaforce Records, 1984)

Por Antonio José Lastres

33 años han pasado ya de la publicación de este legendario álbum. Pongámonos en contexto, METALLICA apenas tenía unos años de vida y ya había publicado su agresivo debut “Kill ‘Em All”, con el se había ganado un hueco en el underground del heavy metal americano, ¿cuál era el siguiente paso entonces? Pues sacarse de la manga este espléndido “Ride The Lightning”, el cual deja a su predecesor por los suelos en todos los aspectos. La inclusión de Kirk Hammett y Cliff Burton como compositores le dio a la banda un espectro compositivo nunca visto. Era la

reafirmación de que estos cuatro jinetes no habían sido una casualidad con su debut, sino que venían para quedarse…y para siempre.

Ocho temas componen este álbum, que empieza con “Fight Fire With Fire” y esa preciosa intro acústica que poco tarda en convertirse en una lluvia de riffs y más riffs marca de la casa. Los METALLICA más veloces y a la vez contundentes los encontrarás en esta canción.

La homónima “Ride The Lightning” es algo más lenta, pero ojo, no menos heavy, probablemente el mejor solo de la carrera de Kirk Hammett se encuentre en esta canción. Otro buen compendio de excelentes riffs de la mano de un Hetfield en estado de gracia.

Se oyen unas campanas, ¿de qué canción hablamos? Evidentemente de “For Whom The Bell Tolls”, donde la banda por primera, pero no por última vez, demuestra su pasión por la literatura, en este caso por Hernest Hemingway en su “Por Quién Doblan Las Campanas”. Otra canción más lenta de lo que venían acostumbrando, pero más épica que ninguna.

Con “Fade To Black” empiezan las hostilidades y la primera acusación a la banda de vendidos y comerciales, no es nueva esta historia como podéis ver. Medio tiempo acústico, oscuro y depresivo, con ese frenético final la hacen una de las canciones más completas del álbum.

“Trapped Under Ice” nos devuelve a los METALLICA más veloces. Una canción de speed metal al más puro estilo con un interludio y un desenlace de canción bastante épico que sitúan a esta canción entre las mejores del disco.

Tal vez la más floja del disco sea “Escape”, un intento algo fallido de canción de radio fórmula reconocido por la propia banda que aún así no está mal del todo, pero si que flojea en el conjunto del disco.

Ya casi en el final de este viaje nos encontramos otras dos joyas, “Creeping Death” y “The Call Of Ktulu” (originalmente titulada “When The Hell Freezes Over”), la primera, un clásico instantáneo, de lo mejor de la discografía de METALLICA, con ese épico interludio y sus coros, y la segunda, una mística e inquietante canción instrumental, donde parece que de un momento a otro aparecerá el terrorífico Kthulu. Otro guiño a la literatura, con Lovecraft como protagonista, de esa genial época en la que la banda tenía la bonita costumbre de cerrar sus discos con bellísimas y contudentes instrumentales, cosa que nunca se debió perder. Excelente forma de cerrar un disco, si señor.

En conclusión, el mejor disco de los californianos. Cierto es que después vinieron otras grandes obras como “Master Of Puppets” o “And Justice For All”, pero la frescura, originalidad y rabia demostradas en “Ride The Lightning” nunca fueron superadas. Con este disco crearon y siguen creando escuela. No importa lo que sean o dejen de ser ahora mismo, METALLICA ya se ganó su entrada al Olimpo hace décadas.

Te gustará si simplemente amas la buena música y el mejor thrash metal ochentero.

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2 comentarios

  1. A mi muy particular parecer, Ride the Lightning es el mejor disco de Thrash Metal de la historia !!.
    Memorias inolvidables de juventud y descubrimiento de un estilo musical que cambió y cimbró la vida de millones de metaleros al rededor del mundo !
    Gloriosos e inolvidables dias aquellos !!

    1. No puedo estar más de acuerdo contigo, Jose Luis. Por desgracia, de esa época solo tengo testimonios y anécdotas de amigos y familiares mayores que yo, ya que yo soy muy joven. Eso si, de lo que no hay duda es de la incontestable calidad que tenían estos muchachos hace treinta años.

      ¡Un saludo y gracias por leer!

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