[bandcamp width=100% height=120 album=1701347281 size=large bgcol=ffffff linkcol=0687f5 tracklist=false artwork=small]
Por: Santi Machín
El “The Obscure I” de la banda HADAL es un disco en el que podemos encontrar el más clásico y típico Doom Metal pero mezclándose con las nuevas tendencias. Un Doom que nos transporta a sus inicios pero sin dejar atrás el sonido de hoy en día.
El disco se abre con “White Shade” un tema muy en la onda de TYPE O NEGATIVE en cuanto a profundidad y sentimiento se refiere. Composición fría y melancólica en sus pasajes más frios y rítmica y animada cuando las guitarras aceleran su paso.
“Low Winter Sun” es algo más lenta que su antecesora. Tema de mucho teclado y dándole protagonismo al bajo. Hablamos de una balada triste y oscura de puro Doom Metal. Las seis cuerdas se presentan suaves y reconciliadoras, dándonos esa atmósfera llenas de sentimientos. Podemos disfrutar de un coro a voz masculina limpia y suave alejándose de ese tono profundo y gutural de la voz principal. Tema muy bello.
La tercera en sonar es “Silent Grave”, el tema más largo del disco con poco más de cinco minutos. Tema que acorde tras acorde nos lleva a ese Doom de los ochenta, lentitud, tranquilidad y belleza oscura es lo que envuelve a esta composición. En ciertos pasajes acelera brevemente su ritmo para llegar a coquetear con el Gothic Metal. Pieza muy buena para disfrutar en lo más interior de nosotros mismos.
Le sigue “Without a Word” la cual comienza con unas guitarras más potentes y con algo más de distorsión, aunque el tema cambia rápido y nos vuelve a introducir en esos ritmos lentos a veces incluso cansinos. En esta pieza el gutural se matiza mucho más y suena algo más fuerte que en las anteriores canciones.
La quinta entrada es la que da nombre al conjunto. “The Obscure I” nos da un principio inquietante, cerca de esas bandas sonoras de películas de terror de serie B. Después de dicha introducción, nos encontramos con el más clásico Doom Metal; instrumentos suaves y limpios y una voz profunda y oscura. Tema que en ningún momento cambia su ritmo pero que nos envuelve en una atmósfera dulcemente oscura y siniestra.
Y cierra el disco “Crimson Vessel” un tema que nos da algo más de “caña”. Las seis cuerdas vuelven a presentarse algo más metaleras en algunos momentos muy breves. El tema se adentra en el Doom más paranoico para jugar con nuestras mentes. Estamos ante el tema más extraño de este interesante disco. Una composición que nos da unos increíbles y mmuy buenos cambios de ritmo. Gran cierre de disco.
En definitiva este trabajo de veintisiete minutos es un álbum de Doom Metal relajado y suave. De ese Doom para los oyentes que añoran a las bandas del pasado. Un disco que nos da pasajes para reflexionar y olvidarnos de todo lo que nos rodea, es decir, un disco que consigue meternos en nuestro mundo y poder así disfrutar aun más de su contenido. Trabajo interesante si lo tuyo son estos andares.
