[CRÍTICAS] ZEALOTRY (USA) «The last witness» CD 2016 (Lavadome Productions)
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Por Luis Martínez
La banda de Boston, Massachusetts, nos ofrece su segundo larga duración “The Last Witness” a través del sello Checo LAVADOME PRODUCTIONS, tras su paso por el sello español MEMENTO MORI RECS. Para la edición de su debut “The Charnel Expanse” (2013). Para todos los que no estén familiarizados con el nombre de ZEALOTRY, decir que es una banda de Death Metal que toma sus influencias de bandas de principios de los 90, pero que no nos recordará a una en particular, esto es lo original de su propuesta, eso sí nos encontramos con una banda con un sentimiento muy oscuro y sobre todo tremendamente técnico en la estructura de sus composiciones.
Al igual que en su debut la banda continua esa vertiente altamente enrevesada en todas las canciones de este segundo álbum, riffs de guitarra que cambian constantemente, distintos ritmos donde se nos ofrece una amplísima gama de atmósferas, unas más pesadas y lentas, otrás más rápidas y agresivas, incluso podríamos pensar en un esquema jazzístico para la composición de cada tema. Esto nos llama la atención en la sensación de que existe como un desorden a la hora de componer, cada instrumento parece ir por su lado, pero nada más lejos de la realidad, todo tiene un orden y el efecto que nos ofrece es de algo realmente decadente y caótico. Se nota una madurez en el estilo de la banda desde su anterior álbum, aquí todo suena mejor ejecutado, sin desmerecer para nada “The Charnel Expanse”, pero sí que se nota una madurez y una pequeña evolución con guitarras que continuamente nos ofrecen unos riffs realmente retorcidos, perfectamente acompañados por una sección rítmica que perfectamente marca el ritmo de cada riff, por un lado el trabajo del bajo es sencillamente increíble, con líneas que refuerzan esa sensación de confusión y enredo, pero que junto al espectacular trabajo de Alex Zalatan a la batería, donde da una magistral clase de acompañamiento y dominio de su instrumento, consiguen que cada tema sea como un viaje hacia un abismo de confusión y oscuridad.
Quizás los seguidores de este tipo de Death Metal de carácter Técnico y fanáticos de bandas como GORGUTS, los continuos cambios de ritmo, las extrañas y tenebrosas melodías así como ciertos contratiempos nos recuerden a los de Luc Lemay (incluso por momentos a la voz de éste), IMMOLATION, esa voz de ultratumba oscura y gutural así como el uso de los armónicos nos los traen a la mente, DEMILICH, en la complejidad de la composición sobre todo, y alguna otra más como CHTHE´ILIST, esa oscuridad y embrollado que se transmite, HUMAN REMAINS, etc.
Pese a todo esto, no pensemos que “The Last Witness” tiene un mal sonido, para nada. Éste es muy bueno, cada instrumento se aprecia perfectamente y muestra el gran trabajo realizado por cada uno de los músicos, tanto en su ejecución como en la composición. Sin duda, es un álbum para degustar con tiempo, no se disfruta plenamente en las primeras escuchas, semejante amalgama de riffs, ritmos y cambios así como la agresividad y oscuridad que nos ofrece no lo hace accesible de inmediato. Temas como “Progeny Omega” con esa guitarra oscura y limpia al inicio y los continuos cambios, la contundencia de ese doble bombo y el gran trabajo de guitarra lo hace un tema increíble. “Heralding The Black Apostle” también nos ofrece partes más lentas y pesadas como una losa, contrastadas con riffs que cambian constantemente tanto de melodía como de ritmo. Podría nombrar el resto de temas, ya que en sí la grabación no deja de ofrecer un mismo estilo, Death Metal de corte oscuro pero tremendamente enrevesado y técnico hasta la médula, pero todos y cada uno de ellos es disfrutable si lo tuyo es este estilo.
ZEALOTRY han conseguido crear un extenso álbum, casi una hora en total, donde han hecho suyas las influencias de los clásicos del género y las han llevado a su terreno con constantes cambios, un ambiente caótico, turbio, que parece incoherente, pero que nos demuestra que todo tiene su sentido en la oscuridad, la atmósfera opresiva y sofocante lograda finalmente.