Por Carlos Bermejo
Ante nosotros tenemos el segundo larga duración de los australianos formados en 2009 MASON, tras dos demos, y el excelente larga duración debut de 2013 “Warhead”, el pasado ocho de julio lanzaron al mercado este “Impervious”.
En este trabajo ya encontramos a unos MASON más hechos, más maduros, subiendo el listón compositivo con respecto a su LP debut. Nueve cortes en algo más de treinta y seis minutos en total, forman este disco, un trabajo que rezuma escuela Thrash Metal old school por los cuatro costados, sobre todo de la escena californiana. Por lo general en el Thrash está todo inventado y ellos no son la excepción pero lo que hacen, lo hacen sobresalientemente, además les ayuda mucho el sonido tan analógico conseguido en la grabación del disco, el cual ha sido grabado por la propia banda encargándose de la mezcla y el master, como en su anterior LP, el productor Ermin Hamidovic (DEMOLITION, IN MALICE’S WAKE, BESTAL MURDER,…).
En cuanto a la portada, también han vuelto a apostar por el ilustrador israelí Eliran Kantor (TESTAMENT, CROWBAR, EVILE, SODOM,…) realizando esta obra de arte, la cual define perfectamente el estilo musical de la banda.
Tras la intro “Eligos” el álbum comienza con “Burn”, un tema que comienza con una colección de riffs galopantes a la vez que agresivos para mostrarnos desde el principio de que pasta están hechos el cuarteto, buena elección para comenzar el álbum.
El siguiente tema, “Tears of Tradegy” continúa con la tónica de la pista anterior, Thrash agresivo y a la yugular, sin aditivos, con una base ofrecida por la batería espectacular. Algo que cambia bastante en el siguiente corte “The Afterlife” en el que observamos un Thrash más moderno con bastante influencia Groove.
El siguiente corte “Impervious” el cual da título al disco, es un corte que sin tener la velocidad de los anteriores mantiene su agresividad característica, con aires de Death melódico y un excelente solo de guitarra, siendo uno de los cortes más destacados que además ayuda a que este álbum no se haga monótono.
Con “Cross This Path” vuelven a la carga con un corte vertiginoso y cargado de rabia con una soberbia parte final instrumentalmente hablando. Con la siguiente “Sacrificed” nos vuelven a mostrar otro corte cargado de rabia y velocidad, directo y sin contemplaciones.
En “Hellbent on Chaos” nos ofrecen uno de los temas más completos del disco, a la velocidad y agresividad similar a las dos anteriores hay que unirle una colección de riffs que son de las mejores del disco.
El álbum se cierra con “Created to Kill”, un corte completo, en el que ofrecen como en el primer tema, la propuesta que ponen encima de la mesa, quizás éste sea estructuralmente más complejo, pero es ideal para cerrar el álbum y animarte a volver a reproducirlo.
Nota - 8
8
Nota
Nueve cortes en algo más de treinta y seis minutos en total, forman este disco, un trabajo que rezuma escuela Thrash Metal old school por los cuatro costados, sobre todo de la escena californiana.