METALLICA (USA) «Masters Of Puppets» (Elektra Records, 1986)

Por Daniel Gallar

Estos últimos años en los que METALLICA han acabado convirtiéndose en una mera caricatura de lo que una vez fueron mucha gente se pregunta qué fue exactamente lo que pasó… 

Supongo que para esta reseña no hace demasiada falta «posicionar» a METALLICA dentro de la historia del metal. Digamos que «Master of Puppets» fue el disco con el que los californianos empezaron a convertirse muy poco a poco en el grupo que hoy son y representan. La voz de James se hizo sin duda más grave. Lars… bueno, digamos por ser Navidad que nunca fue un batería excelente, pero aquí es que empezó a hacerse cada vez más vago. Kirk sin embargo no bajó el listón (ya lo haría unos años más tarde, y de qué manera) con su clase y elegancia y ya por último tenemos a Cliff. Gran bajista sin duda — aunque siempre he pensado que un poco sobrevalorado a nivel técnico. 

Febrero de 1986. METALLICA ya son enormes y el cuarteto norteamericano saca «Puppets» dos años después del magnífico «Ride The Lightning». De golpe y porrazo uno se da cuenta de que la atmósfera es menos oscura que en dicho álbum — aunque el sonido que logran conseguir es intenso y de alguna forma único, con partes innovadoras e intrigantes. A nivel de riffeo no se puede negar que hay un gran nivel técnico. También hay una buena variedad de tempos. ¿Es «Puppets» realmente un disco de thrash? Esta sería una buena pregunta. Si nos ponemos técnicos se trata sobre todo de un disco de heavy/thrash. Un muy buen disco de heavy/thrash, lo cual no es moco de pavo.  

A nivel de voces James ha cambiado, es indudable. Aparte de añadir bastantes partes limpias cuando pone las voces «thrash» ahora su voz es más grave y con menos furia, lo cual hace que suene más «pulido» pero a la vez más «maduro». Ningún problema a este respecto y sus voces se complementan muy bien con la música.  

Adentrémonos en los temas: 

Hablando de thrash, «Battery» y «Damaged Inc.» son los temas más thrash del álbum. Temas casi viscerales. «Battery» comienza con una guitarra española que luego da a paso a un más que agradable y efectivo riff principal que es hoy en día un «clásico». La verdad es que es un tema perfecto para comenzar el álbum. «Damage» al contrario va justo al final del álbum y es si cabe un tema más cañero y un puñetazo en plena cara… aunque «Battery» es sin duda superior y ha superado mejor la prueba del paso del tiempo. 

«Disposable Heroes» es un señor tema — aunque siempre he pensado que le sobran un par de minutos. Se trata del segundo tema «épico» del album. También es el primer tema de METALLICA en el que abordan el tema bélico (en el «Justice» ya lo harían de nuevo con la archiconocida «One») y, aunque decentes, las letras resultan por momentos un poco predecibles y simplonas. A nivel instrumental sin embargo, poco que decir. Gran tema con gran clase mostrando una gran química entre Kirk y James, con infinidad de cambios que van desde partes lentas y melódicas a otras más cañeras con solos hirientes. 

«Leper Messiah», sin dejar de ser un buen tema, es sin embargo el ejemplo exacto de tema de METALLICA un poco sobrevalorado y, si se me apura, aquí nos dan una pista de por qué derroteros iban a ir en el futuro. Se trata de un buen tema, cañero y pesado, más lento que los demás con buenos coros y letras.  

¿Relleno? Pues se me va a perdonar pero «The Thing That Should Not Be» la verdad es que pierde enteros. Riff decente pero inferior al resto del álbum… es como si hubieran querido forzar tener un tema con una atmósfera «doom» y a mi parecer no les salió del todo bien. Tampoco ayuda esa producción con tanto reverb y hace que el tema suene un poco trasnochado hoy en día (al contrario que el resto del disco). 

Y ya para terminar… las dos joyas del álbum, que por supuesto las hay. Por una parte el title track. Seguramente el tema más reconocible de todo el disco y con razón. Riffs galopantes, James cantando de maravilla y esa sección central limpia y melódica que es imposible que no guste a todo fan del metal y rock en general. Los solos son pura elegancia… en fin, poco que decir. Uno de esos temas con una belleza que no tiene fecha de caducidad. Y por otra «Welcome Home (Sanitarium»), que se podría decir que es la «power ballad» de la obra, aunque al final la cosa se acelera y se pone bastante thrashy. La intro acústica es sublime y le sigue un solo memorable. La parte inicial de este tema siempre tendrá para mí un aire casi místico que sólo mejora incluso cuando James empieza a cantar. 

Hoy en día, el «Master of Puppets» de METALLICA sigue siendo considerado uno de los mejores discos de la historia del metal. Yo quizás no iría tan lejos pero sí que se trata de un discazo. Una obra que después de tantos años sigue sonando bella y que te hace vibrar y sentir muchas emociones. Editado en 1986, quedará por siempre para la posteridad junto con el «Somewhere In Time», «Peace Sells» o «Reign In Blood» (todos ellos discos sacados ese mismo año). Supongo que temas como «Battery», «Master of Puppets» y «Orion» han influido enormemente a legiones de grupos emergentes de todo el mundo. Sin embargo, su mejor álbum (problemas a nivel de producción aparte) todavía estaba por llegar con el grandioso «And Justice For All». Después de «Justice» ya se convirtieron en una panda de estrellitas del rock mimadas e insoportables. Lástima… pero esto ya es un tema aparte claro está. ¡MAGNÍFICO!  

«Welcome to where time stands still
No one leaves and no one will…»