SUFFOCATION (USA) «Hymns from the Apocrypha»

A ver… que hecho mucho de menos a Frank Mullen. Sin él a SUFFOCATION le falta algo, sin duda. Su característico tono de voz, esa guturalidad que desprendía y su dinamismo no tienen parangón. Pero hay que conformarse y acostumbrarse. Y como su sustituto no es ni más ni menos que Ricky Myers, proveniente de DISGORGE, una de mis bandas favoritas de brutal Death yanqui clásico, pues el dolor por la ausencia de Frank se disipa enormemente. Míster Myers, además, cantó en otra apisonadora de Death brutal: CINERARY.

Ricky tiene un registro algo cercano a Mullen en alguno de los discos de SUFFO en los que cantó. Y aquí, mezcla su estilo gutural con los registros más bestias de DISGORGE pero algo más controlado para la ocasión. Y es que a SUFFOCATION no debes meterles a un Neanderthal a cantar. No quedaría bien del todo.

Así, en temas como “Perpetual Deception”, “Dim Veil Of Obscurity“ o “Embrace The Suffering”, su tonalidad y sus pulmones y esófago, nos dan una patada en los genitales que nos dejan doblados. Se entiende de fondo algo de las letras, aunque el fondo sea un oso grizzly cabreado.

El trabajo de Terrance Hobbs y Charlie Errigo (joven y prometedor guitarrista de 31 años que ha hecho sus pinitos en PYREXIA), no se diferencia mucho de los que Terrance ya hizo durante años con sus compañeros Doug Cerrito, Guy Marchais o Todd German en diferentes épocas de la banda.

Se han repartido entre ambos la composición de los temas y casualmente, me han gustado más los que llevan el marchamo de Hobbs, quizás debido a su veteranía. Sin despreciar las composiciones del joven Charlie. No querría decir que las suyas son más modernas, porque no quiero confundiros, pero algo de eso hay.

Una cosa curiosa es que los de Terrance son menos a medio tiempo que los de Charlie, pero vamos, ambos le meten caña, no os preocupéis.

El caso de  Eric Morotti a la batería es digno de ser mencionado. Yo soy un fan acérrimo de Mike Smith. Sus trabajos en todos y cada uno de los discos de SUFFOCATION en los que ha participado me han dejado siempre todo loco. Le he visto con ellos en directo en un par de ocasiones y soy fan absoluto de su manera de tocar.

Eric es otro chaval de 31 años que se vió de repente tocando con uno de los padres del movimiento Death Metal americano. Ya lo hizo en su disco anterior “… Of The Dark Light” del 2017 y el caso es que ha sabido acoplarse a esta máquina llamada SUFFOCATION con destreza y maestría. El engranaje funciona bien con él.

Es un tipo muy versátil con las baquetas y es capaz de mantener el tipo e incluso superarse a sí mismo en este noveno álbum. De hecho me gusta más que en el mencionado anterior disco.

Las partes rápidas son muy precisas y los medios tiempos están perfectamente encajados en el conjunto. Le doy un 8, y no le doy un 10  porque esa puntuación siempre irá a Mike Smith.

Y vamos con el quinto en discordia, el bajista Derek Boyer. Ese tipo rubio que toca en directo completamente abierto de piernas y apoyando el instrumento (el bajo, malpensados…) en el suelo.

Este tío es, para mí, uno de los mejores bajistas de Death Metal de la historia de nuestro estilo. Su suprema ejecución de los temas, su manera de tocar, intensa, desquiciada, precisa y memorable, hacen de él el bajista perfecto para SUFFOCATION, sin duda.

Lleva con ellos desde el 2005 y ha demostrado con creces lo que vale. Y aquí se da otro festín de brutalidad.

Como curiosidad hay que mencionar que han regrabado el tema “Ignorant Deprivation” de su disco “Breeding The Spawn” del año 1993. Aposta me he puesto a comparar ambos alternativamente y lo cierto es que me gusta más esta nueva versión del 2023.

Con respecto a la producción, se han decidido a co-producirlo junto con Dominick Grimard y con la inestimable ayuda de Christian Donaldson mezclándolo. Y el resultado no podía haber quedado mejor. Impresionante.

Los temas son puro y típico SUFFOCATION, ni más ni menos. Tienen ciertas melodías (y no es que sean melódicos) que ya han ido intercalando en sus 3 ó 4 últimos discos. Y los medios tiempos son bastante interesantes, ya que mantienen la intensidad, pero sin la velocidad que suele caracterizar a la banda. Pero vamos, si les sigues desde hace tiempo sabrás a qué me refiero.

Si eres fan de ellos o te gusta echarte de vez en cuando alguno de sus discos a la oreja, no hay nada diferente. Es lo que es. Una de las mejores bandas americanas de brutal Death Metal, por no decir la mejor. Te mantienen en vilo y cuando ha acabado el disco piensas que se te ha hecho corto.

“Hymns From The Apocrypha” es un disco cuasi perfecto. En mi caso sólo superado por su primer mini “Human Waste”, por su debut “Effigy Of The Forgotten” y por “Souls To Deny”.

Son 43 minutos de masacre al más puro estilo SUFFOCATION, los reyes indiscutibles del sonido New York Death Metal. Llevan tocando lo mismo desde el año 1988 y les sigue gustando y emocionando tocarlo… ¡y esperemos que por otro buen puñado de años!

Poco más que añadir. SUFFOCATION en estado puro. Brutalidad para mentes enfermizas y deseos as de sonidos extremos. ¡Una puta maravilla!