
Ante todo no podemos plantarnos ante este disco como si fuera otro trabajo de una banda, porque no lo es. Hay un cerebro, que se disfrazó un poco de dramaturgo y se lanzó tras una fiebre creativa donde consiguió plasmar una verdadera saga con casi una decena de voces y músicos de altísimo nivel. Imaginen esas películas donde el personaje principal tiene un plan para robar un museo. Bien, ahora imaginen que va a por los mejores, según él, para realizar este trabajo. Y va contactando uno a uno, para ponerlos al tanto de su plan, de su idea. Pues eso mismo es lo que ha hecho Oha Cade, la piedra fundacional de VALCATA, un ambicioso proyecto de Metal Progresivo, técnico y sinfónico con matices complejos de describir. El disco, del mismo nombre, contiene 10 piezas rigurosamente planeadas y ejecutadas, tal vez, en mayor tiempo que compuestas.
Cada canción contiene a varios vocalistas, los cuales han trabajado con sus características de Soprano, mezo-soprano, barítono y demás… menos “growl” tenemos de todo. Abre una suave instrumental que sería un decorado que no tiene tiempo ni espacio, para luego dar paso a “Our quest”, una obra que, si bien no es tan Metal, tiene unas dosis vocales que están a la altura de, por ejemplo, AYREON por nombrar apenas una de las mayores influencias.
Como piezas más complejas y veloces tenemos “Horror Machine”, una oda con cierto toque de locura y, ahora sí, un Técnico que reposa en un Progresivo limpio y de sonido impecable. No sorprende ya encontrarnos con varias voces tan diferentes entre sí, es un musical épico ambientado en la actualidad de producciones de ordenador, con tomas registradas en un estudio casero y orquestada de violines y trombas de batería que dan paso a un sinfín de elementos amoldados sobre un guion, un libreto, que cada personaje interpreta a la perfección.
A todo esto tenemos detrás una banda que aporta, acaso, lo que una tropa de bailarines a ciertos momentos. Samplers mezclados con teclados y una batería que cambia de estilo, arpegio tras arpegio. Unas guitarras que no se inquietan por demostrar en un riff extenso su capacidad, al contrario, los solos son breves, con un acertado Tech que luego se convierte en puro Metal para dar paso a los cierres que hayan sido pensados para cerrar cada una de las canciones.
Así vamos disfrutando de una noche en la ópera del Metal que combina recursos a diestro y siniestro para un cierre lleno de artificios sorprendentes. “Valcata” y “The termination” (De 7 y 11 minutos respectivamente) son la puntilla para encontrarnos con más influencias medievales y de una interpretación de alto nivel.
La intención del creador de VALCATA está lejos de ser pretenciosa. Se inspiró y, lentamente, fue dando forma a un universo bien acompañado de elementos que han sabido interpretar tanto su idea como el concepto. Trabajado con las ventajas de una era donde se permite de modo no presencial elaborar un disco, cada pieza ha sido fundamental para encontrar una sinfonía técnica, progresiva y sinfónica a la vez. Los actores vocales de este proyecto han sido entre otros: Zuberoa Aznárez, Mary Zimmer, Hadi Kiani, o Liel Bar-Z. Experimentados integrantes de diversos proyectos de altísimo nivel, tanto de orquestas nacionales de conservatorio, como actores de obras de teatro musicales o bandas de Metal Progresivo consagrado.
Un centenar de detalles hacen de este disco una adquisición para valorar tanto por su contenido inmediato al oírlo, como su forma de ser concebido, grabado, mezclado y producido. Repito, no puede ser tomado como un trabajo en la trayectoria de un grupo, es mucho más que un disco, es una obra de arte.
Puntuación
Nota - 9
9
Nota
Un centenar de detalles hacen de este disco una adquisición para valorar tanto por su contenido inmediato al oírlo, como su forma de ser concebido, grabado, mezclado y producido.