ABHORRENT DEFORMITY (USA) «Slaughter Monolith» CD 2018 (Comatose Music)
Por Santi Gzlez
Estamos hablando de una banda Americana, de death metal, que edita su segundo trabajo y este sale a través de Comatose Music. De aquí yo ya empezaría a sacar alguna conclusión, como que, por ejemplo, tengo que escuchar este trabajo. Además podemos leer por ahí que… suenan algo a SUFFOCATION, pues que quieres que te diga, lo escucho y ya está, que son doce temas, treinta y cinco minutos y mis necesidades de death metal son infinitas.
Me encuentro de frente con una producción apabullante. Potente, limpia, grande, gorda, fácil de asimilar y… perfectamente encajada a un sonido que, sin duda, es el que pide esta banda, y este trabajo.
Las guitarras atruenan, la batería es de brutal pegada, muy artificial, pero actual, y el bajo, que no es el instrumento principal de este CD, cumple su función, y sobresale en contadas ocasiones, muy contadas, quizás en las más Core, porque, sí, este trabajo también tiene algo de Core.
Pero no nos asustemos, esto es death metal en estado puro, death metal del “bailable”, death metal del que te hace mover la cabeza y del que incita al mosh, death metal con fuertes influencias grind, muy ajustado hacia el brutal, pero en el cual los tiempos no muy acelerados y profundamente Groove son los que se llevan la palma, y que además, son los mejores. Es un death metal que, con sus contados momentos de melodía, sus contados momentos de brutal y sus contados momentos de aceleración extrema te va llevando por donde él quiere, disfrutando del trabajo, gracias también a su sonido, para que, cuando te quieras dar cuenta, te encuentras absorto por los ritmos de batería y por una voz que no es tan monótona como nos tienen acostumbradas las bandas made in Comatose.
Un trabajo que muestra la pureza extrema del mosh pit hecha disco.
Nota - 8
8
Nota
esto es death metal en estado puro, death metal del “bailable”, death metal del que te hace mover la cabeza y del que incita al mosh, death metal con fuertes influencias grind, muy ajustado hacia el brutal, pero en el cual los tiempos no muy acelerados y profundamente Groove son los que se llevan la palma, y que además, son los mejores.