Por Jorge De La Cruz
La banda estadounidense ALL THAT REMAINS lanzan al mercado su octavo álbum de estudio, bajo el título “Madness” y editado a través del sello discográfico Eleven Seven Music.
La banda, formada en 1998 en Springfield, Massachusetts, está compuesta por Philip Labonte en la voz, Mike Martin y Oli Herbert a las guitarras, Aaron Patrick en el bajo y Jason Costa a la batería.
“Safe House” es el primer tema que nos encontramos en el trabajo, abriéndonos con unos riffs de guitarra y batería bastante potentes y constantes, que dan paso a una voz gutural muy agresiva, que mantiene un tono alto durante todo el tema. Nos encontramos con unos breakdowns bastante agresivos, que cambian por completo el comportamiento del tema, pasando de ritmos muy rápidos a otros muy agresivos con un gran corte, cerrando el tema con un sonido que poco a poco va bajando para dejarnos con “Madness”, segundo tema del disco, del cual toma el nombre, y que nos adentra con unos sonidos algo extraños y pequeños toques de batería, para al momento introducir líneas de guitarra y bajo, que dan paso a una parte mucho más melódica, donde introducen toques de ritmos electrónicos y una voz limpia bastante cambiante, sobre todo en los estribillos, donde notamos unos cambios de tonos muy correctos en la línea vocal.
Llegando al ecuador del trabajo nos topamos con “River City” donde nada más empezar escuchamos uno sonido de teléfono que al acabar nos da unos ritmos muy lentos dominados por la voz limpia, que a los pocos segundos da paso a unos ritmos más elaborados, contando con unas melodías mucho más enérgicas, con guitarras suaves y baterías lentas. En la línea vocal, nos encontramos en su totalidad, con una voz limpia muy leve, que en ciertos momentos sube el todo, sin llegar a ser gutural, dándonos mucha variedad, y consiguiendo un tema diferente al resto.
En décimo lugar nos encontramos con “Trust and Belive” donde una batería bastante rápida nos da las primeras notas, que al momento acompañan unos fantásticos riffs de guitarras, aumentando esa velocidad y agresividad. Las líneas de bajo son bastante audibles, consiguiendo darles mucha profundidad a las composiciones y aumentando el dinamismo de las melodías. En los estribillos nos encontramos con una melodía mucho más pegadiza, donde la voz limpia suena de maravilla, y crea un conjunto fantástico, debido a la gran composición que han realizado.
El último tema original del álbum es “Never Sorry” que no es quien cierra, ya que contamos con una cover de Gath Brook, “The Thunder Rolls” que se encarga de terminar el álbum. En “Never Sorry” nos topamos con unos ritmos electrónicos que nos dan una gran acogida, para luego dar paso a unos pequeños toques de batería mezclado con sonidos de guitarra bastante rápidos, donde la voz limpia suena por encima, añadiendo pequeños guturales y gozando de una buena velocidad, casando perfectamente con los ritmos rápidos de guitarra. Sin duda, un tema bastante enérgico y variado, perfecto para acabar un gran álbum.
En mi opinión, el nuevo disco de ALL THAT REMAINS cuenta con el espíritu con el que ya nos tienen acostumbrados el grupo, con ritmos muy agresivos y potentes y otros más livianos y melódicos, consiguiendo gran variedad en las composiciones y un disco bastante completo en todos los sentidos. La producción con la que cuenta el trabajo, es alucinante, teniendo un muy buen sonido en cada uno de los trece temas, que se disfrutan desde el minuto uno, y que si eres amante del grupo o del estilo, debes escuchar, ya que sin duda no te defraudará este nuevo trabajo.
