AURIUM (SRB) «The Second Sun»

Los serbios de AURIUM salen con un nuevo trabajo “The second Sun” que quiere abrir esa puerta definitiva hacia parajes compositivos más complejos, más Power, aunque mantienen una esencia únder fuerte y con toques de rebeldía. Sin grandes artilugios, y con una contención de la fuerza para no saturar las ideas, nos dejan unas buenas canciones que tienen una muy buena producción y masterización.

Con una apertura poderosa pero tácita, con melodías simples llevadas a un campo más complejo a la hora de la interpretación nos vamos dejando llevar por una vocalista firme, que, con lentitud, nos va acompañando en un concepto ni tan oscuro ni tan luminoso. El primer tramo del disco se ajusta más (o parece) a una melancolía que no tiene prisa por dar un salto hacia la agresividad, tramos armónicos donde un teclado se hace, junto a la voz, en los puntos más fuertes del trabajo. La batería bien al frente, marcando tempos de una marcha que no termina de brillar. Estamos en un teatro de interpretaciones prolijas donde resaltan la pequeña “Curtains Faill” más “operística” que el resto y “Dead landscapes”. Entonces se rompe la cortesía, comienza la brutalidad y ahora sí, reventamos con “”Garbage eater” y “Timekeeper” dos canciones fuertes, donde la velocidad sube gracias a esa rabia que no tiene tanto miramiento hacia la lírica; rompen moldes y estructuras, haciendo que todo sea puro Metal, growl´s (contenidos) y batería únder. Bien.

Entonces llega la épica, la narrativa, el Power extenso y veleidoso que a lo largo de 8 minutos nos pasea por unas interpretaciones que se apuntalan mucho más en las voces. “Phasianidae” es una muestra de variaciones de ritmo que dentro de un disco ecléctico se convierte en una introducción (tal vez) un poco llana… pero da paso a “”Nodus Tollens”; donde todo esto que insinuaron se convierte en realidad. Ejecuciones precisas, interpretaciones deslumbrantes de una voz que sigue siendo sobresaliente e intermitencias rítmicas que suman algo de ferocidad. Desde aquí y hasta el cierre tenemos algo más de estas gigantescas elaboraciones pensadas sobre un pentagrama prolijo que aportan emociones y sensaciones de grises nostalgias. Toques arabescos y sopranos maravillosos… No todo debe ser velocidad y violencia, a veces lo mejor es ponerse a meditar tranquilamente acerca de lo que vendrá, o de lo que ha pasado; esa es la sensación que me deja “The second Sun”; un trabajo correcto que deja un Bonus-track (“Son of the morning star”) que parece escrito con cristales rotos, y la banda al completo se supera a sí misma en cada fraseo. Lo tiene todo, tal vez, incluso más que las canciones hasta aquí escuchadas. AURIUM tiene una propuesta lírica interesante, calidad de composiciones y una idea que no se ciñe al marketing. Recomendado para quienes disfrutan de momentos preciosistas de teclados muy bien escritos y arreglados y voces de conservatorio con calidad sobrada en partes de la escala más alta.