Por Juan Angel Martos
No solo se hace black metal en Noruega, aunque este estilo este muy arraigado en su escena musical y se tomen influencias en multitud de estilos una prueba de ellos son CONDOR, el cual nos trae su nuevo trabajo “Unstoppable Power”, editado a través de High Roller Records. Un furioso trabajo de thrash metal como base, pero con toques de black de los primeros VENOM. Este es su segundo álbum, desde que empezaran allá por 2009, grabado en Berseker Ninja Studios, grabados por Salvador Armijo (BLACK VIPER). Ocho cortes furiosos donde la estela black está presente en todo momento, sobre todo en las voces de Chris Sacrifice, pero pasado por un filtro thrash muy poderoso que impregna cada segundo de la composición.
Desde “Embrace By Evil”, se nota ese regusto por VENOM y el thrash/black de los ’80, donde las guitarras vertiginosas de Maggressor y la percusión endiablada de Obskurvind, repletan el toque maligno que acrecienta la voz de Chris, en un temazo agresivo y con alkgun grito a lo Tom Araya de SLAYER. “Riders Of Violence”, es mucho más rápida con escalas repetitivas donde el mástil se convierte en una montaña rusa y los ritmos de cajas y platos enfurecen la estructura, devolviéndonos las melodías con “Chained Victims”, con una parte final donde el cabalgar de las notas ponen un toque de contrapunto pausando y cerciorando su energía, un temazo.
“You Cant’t EscapeThe Fire”, asienta el thrash en sus composiciones. A destacar tambien es la producción o el sonido sucio y ochentero que le otorgan a su música, y que me recuerda VENOM aún más, además de por la voz rasgada. “Unstoppable Power”, es un trallazo, repleto de riffs y ritmos endiablados marcado por los constantes cambios de ritmos y su toque directo a la yugular, thrash en toda regla. Sin duda, algún as en la manga tenían y ese es “83 Days Of Radiation”, donde un riff perfectamente encasillable en la NWOBHM, se lo llevan a su terreno para enfurecerlo al máximo y poner tu adrenalina a 1000 r.p.m., en el mejor y si no uno de los mejores temas del álbum. La parte final nos llega con “Malevolent Curse”, donde la voz y sus dejadas nos envuelven en un halo maligno y repleto de oscurantismo y agresividad, para remarcar los riffs y las melodías en “Horrifier”, que magnifica sus toques de calidad y su actitud musical, reflejando lo que pretenden transmitirnos a la perfección.
CONDOR, nos deja un álbum corto, pero intenso, con una gran dosis de violencia y energía musical, donde el thrash metal se combina a la perfección con la malignidad del black metal. Un gran disco con temazos como “Unstoppable Power”, “83 Days Of Radiation” o “Malevolent Curse”. Si quieres adrenalina y toques de antaño, o te gusta VENOM, SLAYER…, este disco no puede pasar desapercibido para ti.
