[CRÍTICAS] DESECRATE THE FAITH (USA) “Unholy Infestation” CD 2017 (Comatose Music)

Por Santi Gzlez

Tener en las manos una edición de COMATOSE suele ser lo mismo que tener una joya del brutal death y uno siempre se espera lo mejor y más violento pero dentro de los límites del control en la producción y una técnica de alto nivel. Y no nos han defraudado en esta ocasión tampoco.
Desde Houston nos llegan estos DESECRATE THE FAITH con su segundo CD bajo el brazo, dando caña a diestro y siniestro, como no podía ser de otra forma.
Con una portada al más puro estilo del género, llena de detalles, violenta, de un nivel impresionante y una variedad que parece incluso no venir al caso, pero demoledora para presentar un trabajo demoledor del mismo pelo.
El sonido de este «Unholy Infestation» es simplemente salvaje. Resulta admirable como aún con unas guitarras con una distorsión brutal, una batería rapidísima y un bajo aplastante el brillo y la nitidez son notables. Esto, lejos de reblandecer el trabajo, le da un plus de bestialidad puesto que podemos disfrutar perfectamente de todos los detalles de semejante obra devastadora.
Y es que esa es la principal descripción, devastador. Una selección de riffs de brutal death y death de altísimo nivel, alejándose mucho del old school, pero sin perder en ningún momento la esencia del death metal. Su muestrario de riffs, sin ser nada novedosos ni de corte ultra técnico, son de un nivel altísimo y de una adicción apabullante. Saben perfectamente llevarnos por los ritmos más rápidos para pausar en contadas ocasiones y haciendo ciertas armonías desquiciantes. Todo esto gracias, como decía, a unas guitarras que con una distorsión impresionante logran brutalecer con limpieza el aspecto de todo el trabajo. La batería realmente magistral y un bajo que suena como tiene que sonar un bajo, con cojones cojones. Cada vez que Coleson Cowden le da a la cuerda el pecho se te mete para adentro.
Y que decir del trabajo vocal!! Las líneas son aplastantes y encajadas al milímetro en está amalgama de riffs. Pero es que se ejecución es brutal. Una voz growl muy muy gutural resalta en todo lo trabajo mezclándose en ocasiones con otra más agresiva, pero growl tambien, que en su conjunción generan un espeluznante y diabólico, enfermizo y violento espectro vocal.
Once temazos que en 51 minutos nos desbordan de brutalidad, riffs, ejecución y saber hacer brutal death.