Después de lanzar un par de E.Ps y algún que otro sencillo, los Deathcoretas I, PARIAH lanzaron el 21 de mayo de 2021 su primer L.P «Dystopian Visions» de forma independiente.
La alineación del combo es: Adam Curry (bajo), Josh Musick (batería), Leo McNichol (guitarra), Garrin Beaudoin (guitarra y voces), Steve Poff (voz).
Antes de hacer cualquier reseña de Deathcore, siempre me asalta una pregunta a la mente: ¿la banda será de las que apuestan por machacar hasta aburrir o será versátil? En el caso de hoy, gracias a Odín los giros de dirección están presentes. No voy a mentir, no esperéis un disco acelerado, todo lo contrario. Lo que prima aquí es la contundencia. Sin embargo, y aún a riesgo de parecer excesivamente reiterativo, puedo decir sin temor a equivocarme que existe variedad estructural, cosa que es muy de agradecer. De esta forma, consiguen mantener la atención del oyente en todo momento.
Asimismo, cabe resaltar la inclusión de las instrumentales «Shrine» y «Crown Of Creation». La primera es un corte acústico bastante curioso. La segunda, rezuma oscuridad y melancolía a partes iguales. De la producción no sé si poner pega o no. Me explico. El disco suena atronador, pero algo genérico. Mientras tanto, el artwork viene como anillo al dedo si tenemos en cuenta el título del redondo. No obstante, personalmente, la portada no me ha dicho demasiado.
Las seis cuerdas revientan cráneos a diestro y siniestro con una facilidad espasmosa. Las dobles armonías mandan durante los casi 33 minutos que dura el Elepé. Los riffs de Leo y Garrin no os dejarán indiferentes, debido tanto a la bestialidad que emanan, como a su carga emotiva. Además, me agradó el hecho de que no temieran introducir solos en «Denier’, «New Dawn» y «Dystopian Visions». El abanico de registros vocales es cuanto menos curioso. Screamings agudos, shrieks y clean vocals furibundas, comparten espacio con los todo poderosos y predominantes growls. Ya os lo he dicho un poco más arriba. En la percusión prima la potencia a la velocidad. Eso sí, una vez arrancan los up tempos o los «golpes relámpago», se os caerán los palos del sombrajo.
«Oblivion», «Denier» y «Vulture Mine» lograron volarme los sesos, siendo sin duda mis cortes predilectos de todo el Long Play. Poco o nada más me queda por decir queridos lectores. Espero que le deis una oportunidad al plástico que me he dedicado a comentaros durante estas líneas, ya que realmente lo merece.
Puntuación
Nota - 7
7
Nota
Antes de hacer cualquier reseña de Deathcore, siempre me asalta una pregunta a la mente: ¿la banda será de las que apuestan por machacar hasta aburrir o será versátil? En el caso de hoy, gracias a Odín los giros de dirección están presentes. No voy a mentir, no esperéis un disco acelerado, todo lo contrario. Lo que prima aquí es la contundencia
