R.A.I.D. (IND) «Imperium» CD 2019 (Rotweiler records)
Desde el misterioso subcontinente Indio nos llega “Imperium” segundo trabajo de estudio de la banda R.A.I.D., un Hardcore bien trabajado, producido para que suene, además de fuerte, con toques clásicos (pero no aburridos o repetitivos) y una personalización del sonido del grupo. Interesante, además, el misticismo y la crudeza lírica en las letras que toca temas sensibles sin hacer escándalo (editado por Rottweiler Records).
Abre el disco el primer single “Unbreakable”: excelente carta de presentación para demostrar una fuerza que nos va a acompañar a lo largo de las 7 canciones que componen el disco. Tiene ese sonido callejero y clásico del Core más elemental, pero le dan una vuelta para hacer una buena propuesta que agrega algunos elementos que le dan un buen color a todas las canciones, acariciando el Metal extremo en más de un tramo. Un blastbeat firme y que gobierna todas las canciones, apoya de una manera oscura y vengadora a la voz que hace un recorrido doloroso y justiciero contra el mal y la violencia. “Seven” y “Outrage” son claros ejemplos de una velocidad que no cesa, no hay grandes variaciones, pero los recursos que van apareciendo y agregando giros compositivos los mantiene frescos y constantemente en acción. Desde la portada un gigantesco muchacho con la espalda tatuada y un pañuelo de “banda callejera” latina nos anuncia de qué va la cosa, y aciertan mucho en poner tan al frente a la batería y el bajo para llevar casi todo el peso del sonido. Las melodías de las guitarras se suceden una tras otra y se amoldan perfectamente a los cambios de ritmo con unos break´s que entran justo a tiempo.
En “Blind” y “Judged” entran ya los puñetazos cortos y violentos, apenas pasan los 2 minutos cada una de las canciones que quedan hasta el final, haciendo que el concepto se agigante y escupa sin asco las esperanzas que desde el “no surrender” hacen pie para quitar los estigmas de las clases más jodidas y sin mucho futuro. “Steadfest” e “Imperium” son pequeños himnos con reminiscencias más Punk pero sin abandonar el Hardcore, rudas, secas y que te ponen las pilas para que sientas el mensaje completo. Una buena mezcla entre ICE T y BIOHAZARD, pero esperanzados en creer que, con actitud, se puede escapar de la violencia callejera y el crimen. Mola.
Con respecto al tema de “bandas cristianas” bien es sabido que muchos artistas son creyentes, del tipo Evangelista (Adventista, Mormón etcéteras) que hacen una vida que busca ayudar a que el rebaño de Cristo crezca y, las ovejas descarriadas, vuelvan a tener Fe. Pues lo que en muchas “iglesias” se considera satánico o maléfico, con rollos del medioevo casi, grupos como R.A.I.D., y otras bandas que, a veces, hasta es sorprendente porque uno no lo imagina, son realistas y bien recibidos por acercar el Mensaje a los jóvenes. Incluso a través de un estilo que no se acerca mucho a esas misas en los Templos, pero saben que en los barrios la violencia es quien manda y si Cristo debe salir a enfrentarse a Gangs o Maras que atraen a sus filas a miles de personas que, en la sociedad, no encuentran otra cosa más que desprecio, segregación y racismo y pegar un par de hostias que así sea. De ahí que las letras de este trabajo se conformen en una buena parábola que comienza, justamente, describiendo la escena que rodea esas calles crueles y los pecados capitales de avaricia, ira o lujuria; R.A.I.D. se lo toma a pecho y no es casualidad que esa sea la temática de la canción “Seven” y, en verdad, lo que están haciendo es predicar acerca de los peligros de no seguir los caminos misteriosos del Señor.
Cierran, justamente, con la canción que da nombre al disco: “Imperium”, que nos habla de la posibilidad de construir un futuro provechoso y cómodo sin necesidad de caer en el delito, ni en la violencia, ni en el peor de los pecados: el asesinato, remarcando la imagen recurrente del “bloodbath” como punto de partida para un apocalipsis personal.
“Imperium” a nivel musical es un gran trabajo de Hard Core, bruto, fuerte y emotivo. Con una voz que se mantiene en el tono constantemente y ruge en los momentos necesarios. Muy buenas bases y grandes break´s, basados por completo en la potencia, sin disparar con cambios abruptos a velocidad extrema, aprovechan cada minuto para desplegar la eficacia de la versatilidad del baterista, que se pone la banda al hombro y le da matices más actuales y extremos a un sonido clásico. Letras interesantes que son una declaración de la necesidad de que haya algo más allá de la muerte, pero que es fundamental tomar decisiones adecuadas en esta vida que, en resumen, es la que de verdad importa. Gran disco de R.A.I.D. para poner en una lista de reproducción con SICK OF IT ALL, SUICIDAL TENDENCIES o HATEBREED sin miedo a equivocarnos.
[REVIEW: Sebastián Abdala]
Nota - 8
8
Nota
Gran disco de R.A.I.D. para poner en una lista de reproducción con SICK OF IT ALL, SUICIDAL TENDENCIES o HATEBREED sin miedo a equivocarnos.