Últimamente el sello italiano My Kingdom Music esta editando material muy interesante y una de sus nuevas propuestas patrias son AGANOOR y su nuevo trabajo “Doomerism”, cooeeditado con Blood Rock Records, donde el stoner y el doom se funden para entregarnos seis cortes rocosos y atmosféricos con tintes psicodélicos.
Este es el trabajo debut de los italianos, donde Anth Maelstrom (guitarra y fundador de la banda) y Stephen Drive (bajo), llevan el peso compositivo, junto con la voz peculiar y poderosa de Dan Ghostrider y la percusión de Alex Leonov, abriéndonos con “Bury My Soul” e “Icarus”, dos cortes que podrían valer para resumir la idea musical que nos proponen.
Mientras el primero es más pesado y rocoso, creando un muro sónico con el trabajo de las cuerdas e introduciendo elementos psicodélicos e hipnóticos como la parte central, el segundo corte vira más hacia el stoner, aumentado las revoluciones y generando unos ritmos de corte americano, sorprendiéndonos con una parte melódica y lirica que enaltece el conjunto.
“Nadir” se eleva como un chute de ayahuasca, lenta, pesada y onírica, con una instrumentación y unas líneas vocales que te transportan a otra dimensión, que puedes continuarla con “Emerald Lake”, donde las voces en las estrofas tienen un efecto reverb y cambia la tonalidad casi narrativa y la entremezcla con tintes melódicos que encajan a la perfección, aunque el corte se hace un poco pesado por su poca flexibilidad.
Acercándonos al final “Morbid Skin” mantiene el peso de la banda y el conjunto del álbum con otro corte rocoso de stoner/doom, donde la parte central se luce con un solo de guitarra etéreo y sin florituras que cabalga sobre una línea de bajo omnipresente, llevándonos en volandas hacia el cierre con “Mind Shadowing”, un autentico temazo donde mezclan todos los elementos que definen el sonido de AGANOOR, en un debut muy prometedor.
Valoración
Puntuación - 8
8
Nota
AGANOOR debutan con “Doomerism”, seis cortes de stoner/doom rocoso y atmosférico, con tintes psicodélicos y una producción envolvente. Un trabajo hipnótico y prometedor que define con fuerza su identidad sonora.
