ACATHEXIS (X) «Immerse»

Desde Amor Fati Productions nos llega el segundo trabajo de ACATHEXIS, “Immerse”, donde el black se transforma en atmósferas que trascienden el subconsciente y recrean paisajes tan oníricos como densos.

Producto de las mentes de Dany Tee (LOS MALES DEL MUNDO) y Dehá, multiinstrumentista inmerso en multitud de proyectos como BRAE, CHAINES, DEHÁ, IMBER LUMINIS…, a los que se une en la percusión Jacob Buczarski (MARE COGNITUM, DET EVIGA LEENDET), una conexión entre Argentina, Bélgica y Estados Unidos que da su fruto creando uno de los álbumes de 2024.

Dreams Of Scorched Mirrors, abre el álbum de forma acústica y limpia, pero son tan solo unos segundos para que la explosión black transgreda tu mente y cree una debacle musical, con un Dany inconmensurable presentando multitud de registros vocales, con agudos que recordaran a todo aficionado al black metal a Dani Filth en su mejor época, pero también introduce desgarradores pasajes rasgados y guturales muy poderosos, acompañado a la perfección por un percusión endurecida y una estructura musical que a lo largo de sus 12 minutos demuestra la calidad compositiva entre la agresividad, la melodía, los pasajes épicos, los momentos evocadores, solos de guitarras perfectamente encajados…, y es que ACATHEXIS juega en otra liga muy superior.

“Adrift In Endless Tides”, es un ciclón sonoro de atmospheric black metal, donde las melodías de las guitarras y los detalles irrumpen a cada paso que das con ciertos toques épicos y un toque lóbrego que recorre toda la canción transformándola en una epopeya única que deja paso a “The Other”, en la que recoge un alma idílica más centrada en el black metal pero con una carga ambiental muy fuerte y unos cambios de colores espectaculares, donde su parte central alberga un pasaje onírico y reflexivo repleto de belleza, una tormenta perfecta con su ojo de huracán.

Y es que son tan solo cuatro cortes y sin darte cuenta llegas al cierre final con “A Slow, Weary Wind”, donde ACATHEXIS nos presenta 15 minutos de gloria, sin duda un tema que alberga toda la filosofía que pretenden transmitir, con un inicio donde los tintes dooms y melancólicos comandan la estructura musical, alternando alaridos y guturales mientras se desarrolla la atmosfera para ir acelerándose poco a poco, donde las guitarras envuelven de una neblina cada nota que desarrolla, donde su parte central se difumina y calma la tonalidad con armonías continuas y un cierto minimalismo sonoro antes de la explosión final. Un temazo, para cerrar un enorme álbum.