Banda polaca, de Breslavia (Wroclaw), que nos presenta, a través del sello Theogonia, su segundo disco de larga duración, tras el primero, de 2020, titulado “Ashes”. Lo que nos ofrece ANTIFLESH en esta grabación con ese título tan religioso, “Hosanna” (“sálvanos”, de la tradición judeo-cristiana), es un magnífico Black Metal que sigue los cánones de buenas y conocidas bandas polacas, como es el caso de MGLA. De hecho, su estética, aunque a cara descubierta, es muy similar. Y la música también tiene elementos de ese grupo (por ejemplo, en el segundo corte, “My Name is Death”).
“Hosanna” nos ofrece 12 temas, aunque tres de ellos son breves interludios que encajan perfectamente en la música de ANTIFLESH. Los restantes 9 temas, de una duración que oscila entre 4 y cerca de 7 minutos, son una muestra excelente de un Black Metal muy bien elaborado, complejo, intenso, lleno de atmosferas frías. Y este ambiente gélido y oscuro, como ocurre con otras bandas de su país, no se consigue con efectos o ambientaciones “artificiales”, sino, principalmente, con unas guitarras (¡magníficas!) que saben añadir en el momento justo líneas y riffs que transmiten ese aire frío y esa desolación, a lo cual ayuda la producción, que genera, cuando corresponde, espacios sonoros “con fondo”. Es habitual crear esos momentos de atmósfera fría con teclados y, como acabamos de decir, con efectos de sonido, pero ANTIFLESH lo hace con los instrumentos básicos. Dejando a un lado los interludios, en los temas “normales” hay teclados, sí, pero como un complemento con el que crean un ligero fondo en algunos de los temas, como ocurre en “Holy Poison” o “Black Manifest».
Tanto desde una perspectiva individual como del conjunto del disco, los temas no son lineales o con una estructura convencional. Hablamos de un Black potente, rápido, pero incorporando en los temas partes a medio tiempo, o, mejor aún, jugando con los cambios de ritmo (es una constante del disco): rápido, medio tiempo, rápido, lento… Podemos oír una verdadera explosión de Black Metal feroz y, de repente, comenzar un medio tiempo que te deja helado o sorprendernos con la incorporación de una percusión con aires marciales (“Et Gloria in Saecula”, “Kres Istnienia”). Pero no olvidemos que esto es Black Metal, y muestra de ello son “Black Dawn” e “Impaled Flesh”, que, dentro del estilo de ANTIFLESH, son los más cercanos al Black ortodoxo. La voz también juega con los cambios (aunque mucho menos que la música), combinando una agresiva, la predominante, con otras más agudas, ásperas, desgarradas. La parte rítmica cumple su papel a la perfección, con una buena batería y un bajista que hace bien su trabajo y se aprecia (por ejemplo, en “Impaled Flesh”).
La producción y, en general, el sonido son muy buenos. Incluso en las partes más rápidas y feroces todo sigue en su sitio y se oye perfectamente. La portada es apropiada para la música de ANTIFLESH, oscura, fría. Simple, como es habitual en el Black Metal, pero efectiva.
En suma, me ha gustado mucho. Gran grupo y gran disco.
Valoración
Portada - 8
Música - 9.5
Sonido y producción - 9
8.8
Nota
“Hosanna” nos ofrece 12 temas, aunque tres de ellos son breves interludios que encajan perfectamente en la música de ANTIFLESH. Los restantes 9 temas, de una duración que oscila entre 4 y cerca de 7 minutos, son una muestra excelente de un Black Metal muy bien elaborado, complejo, intenso, lleno de atmosferas frías.