Por: Eduardo Rodríguez
No cabe ninguna duda, soy un redactor afortunado. Me ha tocado la paja más corta a la hora de hacer la reseña del nuevo álbum de PRONG, que saldrá en las próximas semanas a través de SPV-Steamhammer para Europa, los cuales nos han hecho llegar la promo con bastante antelación. Doble alegría, porque esto significa que nuestra revista digital va creciendo poco a poco y nos van teniendo en cuenta, incluso, las compañías más grandes.
Bueno, después de estos instantes de autocomplacencia gratuita vamos a meternos en la continuación del cd de versiones “Songs From The Black Hole” que suma el 8º larga duración (¡tercero en tres años!) de las huestes de Tommy Victor, toda una leyenda que también forma o ha formado parte de DANZIG y MINISTRY (por si alguien en el universo metal aún no lo sabía)… casi nada.
Como es habitual, los neoyorquinos mezclan crossover, thrash, hardcore y punk a partes iguales. Esa mezcla que se ha convertido en marca de la casa desde el ya lejano 1986. Como dato a tener en cuenta, si no me fallan las cuentas, la actual formación es la única que se ha mantenido en tres discos seguidos.
“X-No Absolutes” no ofrece ninguna novedad en su línea musical. No sorprende pero tampoco decepciona y mantiene el nivel de atención durante los 41 minutos que se reparten en 12 pistas. Podríamos destacar trallazos más rápidos y hardcore como “Sense Of Ease”; temas pesados en su onda más crossover como “Ultimate Authority” o “Cut And Dry” y otros que seguro se convertirán en himnos de su nuevo set list en vivo, como son “Without Words” o “In Spite Of Hindrances”. También cabe reseñar “Do Nothing” (una especie de balada crossover-thrash) y “Ice Runs Through My Veins” (meláncolica y con espíritu de radio fórmula).
Un trabajo que ofrece lo que se espera de él de un modo dinámico y efectivo, totalmente fiel a la vieja escuela. PRONG no decepciona… ni evoluciona… pero ni falta que le hace.
