INCANTATION (USA) «Profane nexus» CD 2017 (Relapse Records)

Por Vicente Sánchez

INCANTATION vuelven para demostrar que su death metal oscuro y muy personal sigue estando vigente, tras casi 30 años de carrera, este “Profane nexus” es su onceavo álbum, además de numerosos EPs, splits y demás formatos, las huestes de John McEntee nos traen una buenísima ración de vieja escuela para poner de nuevo los pilares del death metal sobre la mesa.

No es una banda que tenga que demostrar nada a estas alturas, unos veteranos de la escena, influencia de innumerables bandas y aun en la brecha, ritmos pesados y densos, riffs poseídos que cabalgan en un continuo ir y venir, pero nada de virtuosismos innecesarios, como de costumbre, van al grano, no se dejan llevar por pasajes interminables, el sonido impío típico de esta banda, no como sus primeros trabajos, pero siempre en esa línea, en general se trata de su death metal, rompiendo con “Muse”, y los siguientes que van en la misma línea, con momentos lentos e intensos como “Incorporeal despair”, la siguiente “Xipe totec”, un tema rápido y corto, antítesis del anterior, el tema del video “Lus sepulcri”, potente y rápido, con las partes melódicas del old school que tanto nos gustan, un gran tema, un instrumental que son sonidos en el que el título es más largo que el tema en sí. Los siguientes temas van en la línea general del álbum, que no es que sea monótono sino todo gira acorde a un sonido y una idea del death metal, propia de INCANTATION, “Omens to the altar of onyx”, un tema denso, con muy buen riff melódico al principio, “Ancient rise”, para cerrar, tema lento y agónico, como un doom oscuro, muy bueno, ritmos muy pesados, vieja escuela en todas sus formas en este disco.

Bueno, como he dicho antes, qué os voy a contar de esta banda para los que la conozcan, pues que sigue la línea de sus últimos trabajos, a mi particularmente me gustan, para los que no la conozcan, pues que ya están tardando en repasar toda su discografía y ver cómo se puede evolucionar sin perder la esencia, y `permanecer fiel a un sonido. Por supuesto como músicos ya he dicho que nos son virtuosos, ni falta que les hace, la voz sigue siendo cavernosa y oscura, la batería una máquina de demoler sin necesidad de ir a mil por hora, y las cuerdas pues soltando los riffs característicos de la vieja escuela y esta banda en particular.