LINED (ESP) «Soulcrifice»
Art Gates Records, 2020
Hay un momento en la actuación de CARLOS SANTANA en el festival de Woodstock de 1969 que puede que sea el momento en el que todo cambió, tanto para él como para su banda y, por extensión, a la gente que estaba allí reunida. Con una banda recién formada, con un primer disco que estaba a punto de salir a mercado, los allí presentes disfrutaron de una mezcla de percusiones afro-caribeñas, fraseos jazzys y arreglos más Rock, capitaneados por un veinteañero SANTANA, que, de la noche a la mañana, se convirtió en leyenda. Y para finalizar aquel concierto, “Soul Sacrifice”, uno de los grandes temas del guitarrista mejicano. ¡Colorea y aprende con Teo!
El sacrificio del alma, el último sacrificio, ¿hasta dónde estáis dispuestos a arriesgar por algo que queréis? ¿Hasta el alma? Pues hasta ahí son capaces de llegar los músicos dedicados, al sacrifico del alma, al “SOULCRIFICE”. Vamos, vamos, niños y niñas, ¿acaso no sabéis que Robert Johnson vendió su alma al Diablo en un cruce de caminos para convertirse en el mejor Bluesman? ¿O no recordáis, como cantaban los BARÓN ROJO, a dónde van los roqueros? Aunque también es cierto que hay bandas que van hacia la cima, con el correspondiente sacrificio del alma y tal es el caso de LINED que en una misma palabra unen las dos de las que estamos hablando, Soul y Sacrifice, “SOULCRIFICE”, y a dar leña, como corresponde y como esperamos.
“Bad Omen” abre con un abrumador sonido que nos da las primeras pistas, una guitarra desgranando una melodía ascendente mientras la otra va cortando el riff metálico doblada por los timbales de la batería. Sí, en efecto, profético, pero que sea una mala profecía está por ver. Pues no, no era mala. “Rotten Society” entra a saco, con el medio tiempo pulsátil llevado con maestría por las crujientes guitarras y la batería. Pero que si hay que acelerar, se acelera. No hacen falta demostraciones virtuosas; groove, emoción, pulso y garra. Y una constante que vamos a descubrir a lo largo del disco y es el efectismo de los temas, unos desarrollos instrumentales muy concretos y muy bien llevados para llevar a los temas a su plenitud, a esa sensación de que todo está ahí, por un motivo y que nada sobra, que nada está de relleno. De hecho el disco son once temas en cuarenta minutos. Pero, ¡qué once temas y qué cuarenta minutos!
Pero si tenemos un tema tan bien llevado y tan bien equilibrado como el siguiente, “Buried Alive”, con el perfecto equilibrio entre el riffing más Melo-Death, la evolución de las melodías y como nos van llevando hacían donde LINED quieren, ¿qué más se puede pedir? Pero la banda continua, inagotable, desarrollando un conciso y crujiente hibrido de Thrash y Death Melódico, una auténtica tormenta perfecta de groove, de riffs crepitantes que te enloquecerán con largos desarrollos instrumentales enfocados, como ya he dicho, no hacia el fraseo hipertécnico, si no a la pasión y el sentimiento antes del postureo y la falsedad. Escucha “Nowhere to Run” y sabrás de lo que hablo, porque lo sentirás dentro. Del mismo modo, el resto de temas del disco. La sensación de trabajo, de horas de dedicación, de pulir detalles, de que aquí el tema evoluciona por estos derroteros porque era lo que el tema necesitaba para quedar redondo, está implícita en cada surco, en cada pista.
Temazos como “Slaves” o la magnífica “Devil”, con sus multiples cambios, ambientes y velocidades otorgan a la música de LINED de esa sensación orgánica y visceral. Sí, estamos escuchando un monolito de Metal, pero vivo, como un golem, una entidad que se mueve al paso de “Still Outdated”; o notar como se erizan los pelos de la nuca ante el riff de “Parasite”, o sentir que hay más Groove en “Betrayed” que en los mejores momentos de PANTERA… Y para redondear, cerramos el álbum con un homónimo “Soulcrifice”.
Hay gente, como ya he dicho, como ROBERT JOHNSON que son capaces de vender su alma al diablo en un cruce de caminos con tal de convertirse en el mejor Bluesman. Hay gente como SANTANA que cerró su actuación en el Woodstock convertido en leyenda. Y, luego, hay gente como LINED que –no creo que hayan vendido su alma- son capaces de poner todo su trabajo, toda su capacidad, toda su creatividad y toda su emoción (toda su alma a fin de cuentas) en un trabajo que los encumbrará al lugar que les corresponde.
Puntuación
Nota - 9.5
9.5
Nota
Y, luego, hay gente como LINED que –no creo que hayan vendido su alma- son capaces de poner todo su trabajo, toda su capacidad, toda su creatividad y toda su emoción (toda su alma a fin de cuentas) en un trabajo que los encumbrará al lugar que les corresponde.