REFLECTION (GRC) «Bleed babylon bleed» CD 2017 (Pitch Black Records)
Por Alberto Zamora
Si el primer tema de un disco se llama “Marching to Glory” y el segundo responde al nombre de “Glorious Victory” no hace falta ser un lince para coscarse que el disco no va a pecar de minimalismo. Y efectivamente, este “Bleed Babylon Bleed” no es un disco para escuchar con cascos a oscuras; lo suyo es oírlo con el hacha en ristre y cargando hacia la batalla. A los coros épicos, a lo THERION, de “Glorious Victory” me remito.
REFLECTION le deben mucho a CANDLEMASS pero servidor no encuentra disparatado buscar referencias en grupos como MANOWAR, sin el componente paródico macho men, o en BLIND GUARDIAN, cuando estos se ponen batalleros y no seres del bosque. “The Iron Tower” deja constancia de ese componente grandilocuente (sobre todo en las voces) del que hacen gala los griegos. Ellos se definen como epic/doom y si de lo segundo encuentro más bien poco, de lo primero hay para dar y tomar.
“Fallen Shadow” sigue ofreciendo más matraca de batalla, con buenas guitarras, solos acertados y un apoyo sutil de los teclados, que en ningún momento cargan las tintas. Aquí solo hay heavy metal señores. En “Takla Makan” puede verse la influencia de los padrinos suecos, además de añadir unas variadas guitarras arábigas. “Time Traveller” tiene un aire MAIDEN en las voces y en el estribillo: como digo siempre, la doncella es inevitable; aunque no me han gustado los teclados de mercadillo en el ecuador del tema.
En “Stormbringer” directamente colabora el cantante de CANDLEMASS (no el melenas original) por lo que las comparaciones ya resultan evidentes. Por su parte “Ruler of my Own World” se pone algo más cañera en su inicio, pero tranquilos, que todo sigue igual; algo que corrobora el cierre del álbum con “Bleed Babylon Bleed”, de la cual me ha gustado la forma de estructurar los fraseos vocales de las estrofas así como el fantástico estribillo. En mi opinión el mejor tema del disco y un cierre perfecto para dejar un buen sabor de boca.
REFLECTION están de aniversario, 25 años nada menos, y desde luego este “Bleed Babylon Bleed”, que supone su cuarto álbum (no se andan con prisas los griegos), se establece como un excelente regalo para todos sus seguidores.