THE HU (MNG) «Rumble of Thunder»
Better Noise Music, 2022
Vamos a hacer unos cálculos muy sencillos y en números redondos. El 15 de noviembre de 2022 la población mundial superó la cifra de los 8000 millones. Y ahora hablemos del gran Gengis Kan que, allá por el siglo XII-XIII, expandió el Imperio Mongol desde el Pacífico hasta la zona de Mesopotamia. Era común entre los mongoles tener varias esposas y concubinas. Muchos estudios relacionados con la descendencia del Gran Kan indican que alrededor de un 8% de la población que vive en el imperio que él conquistó comparte el mismo cromosoma Y (un cromosoma que se transmite a los varones y que se hereda del padre). Haced cuentas, niños y niñas, ocho por ocho, sesenta y cuatro, hago los porcentajes, blablabla… Podríamos hablar de unos 640 millones de personas que, por decirlo de alguna manera, tendrían un gen de Gengis Kan. Vamos que a lo mejor tú, o yo, o tu primo, descendemos del Gran Kan. ¡Colorea y aprende con Teo!
Quizá por eso, nos molan tanto THE HU. Si es que hacen apenas tres-cuatro añitos sacaron su primer disco “The Gereg”. Pues estamos de enhorabuena: descended de vuestro caballo yakuto, pasad a la yurta y calentémonos al calor de este fuego mientras escuchamos el nuevo trabajo de la banda: “Rumble of Thunder”.
Pocas sorpresas por esta parte. El álbum abre con “This is Mongol” y las dos señas características de la banda siguen presentes. Por una parte, el morin juur, el instrumento de cuerda tan característico que utilizan con únicamente dos cuerdas y el clavijero en forma de cabeza de caballo. Y en segundo lugar, esa peculiar forma de cantar denominada xöömej, el canto de garganta difónico, con el que son capaces de generar, simultáneamente, dos o tres sonidos, siendo el intérprete el que selecciona y amplifica unos u otros. ¿Hay o no hay pa’cagalse? Pues eso fue lo que nos flipó cuando descubrimos de puta carambola aquel “Wolf Totem” y es la senda que siguen nuestros mongoles favoritos. “Yut Hövende” tiene una sonoridad que bien podríamos decir que se enraíza en el Blues. Probablemente, BB KING o JOHN LEE HOOKER no tuviesen nada que ver con los mongoles, pero la atmosfera de la canción tiene esa reverberancia bluesy. Por el contrario, “Triangle” con sus inflexiones xöömej, tiene una melodía pegadiza, positiva y brillante, que me hace pensar en una versión mejorada del “Yuve Yuve Yu” de su anterior trabajo. “Teach me” me hace pensar en atmosferas y sonoridades más country, aunque todo convenientemente tratado por THE HU. Y llegan unos coros que muchos, pero muchos grupos, firmarían por haber grabado. Esto en directo, es un estado viniéndose abajo.
De todos modos, no me hagáis mucho caso, que ya es el tercer cuenco de leche de yak fermentada que me bebo. Así que servíos un cuarto cuenco y alzad vuestros puños al son de “Upright Destined Mongol” y celebremos todos juntos que quizá pertenezcamos a ese 8%. Lo que es indudable es que estos chicos tienen y siguen conservando una increíble capacidad para escribir estribillos que, aunque sean cantados en mongol, hacen que se te inflame la sangre y aprietes los dientes y los puños. “Sell the World” es una buena muestra de su dominio del canto difónico, “Black Thunder” sigue por los mismos derroteros y ya les gustaría a muchos gritones afamados tener ese control sobre las cuerdas vocales. Es maravilloso escuchar la variedad de registros que tiene un morin juur con apenas dos cuerdas. Volvemos a unas pinceladas más “country-hu” con “Mother Nature”, más íntima, más colorista, más THE HU afianzándose en su estilo. “Bii Biyelgee” podría ser un temas más Alternative-THE HU, que continua con “Segee”, que rezuma orgullo y poderío. “Shini Hutu” tiene un inicio grueso, una parte desangelada y aunque está bien resuelto, se me queda a medio gas (¡demasiada leche de yak fermentada!). Después de varias escuchas, le pillo el tranquillo y me acaba chiflando, pero… Cierran con “Tartar Warrior” y aquí la voz es engorilada, furiosa, rezuma orgullo de raza. Es fácil imaginar una estepa, una horda que avanza despacio a lomo de sus pequeños y agiles caballos, los arcos recurvos a la espalda, toda una hueste, todo un pueblo avanzando al unísono, desplazándose, conquistando… Fieros en la batalla, prestos para la risa y la vida sencilla y austera de los nómadas, sin más hogar que el cielo sobre sus cabezas…
Así que, como he dicho antes, poca sorpresa por aquí. Pero, hey, ¿os imagináis a APOCALYPTICA tocando sin sus afamados Stradivarius? ¿O a Neil Peart tocando sin su mastodóntico kit de batería o a Slash sin su chistera y su Les Paul? ¿Pues entonces? “The Gereg” fue la sorpresa, “Rumble of Thunder” es la consolidación y THE HU solo hay unos y siguen por la misma senda de conquista que su antepasado. A ver si hay suerte y tengo yo un poco de ese 8%.
Puntuación
Nota - 9
9
Nota
Así que, como he dicho antes, poca sorpresa por aquí. Pero, hey, ¿os imagináis a APOCALYPTICA tocando sin sus afamados Stradivarius? ¿O a Neil Peart tocando sin su mastodóntico kit de batería o a Slash sin su chistera y su Les Paul? ¿Pues entonces? “The Gereg” fue la sorpresa, “Rumble of Thunder” es la consolidación y THE HU solo hay unos y siguen por la misma senda de conquista que su antepasado. A ver si hay suerte y tengo yo un poco de ese 8%.