WESENWILLE (NDL) «II: A Material God»

Desde Utrech, Holanda y editado a través de Les Acteurs de L’Ombre Productions, nos llega el segundo trabajo de WESENWILLE, “II: A Material God”, donde certifican su sonido black, creando pasajes contundentes y repletos de fiereza, junto a melodías oscurizadas por un sentimiento de maldad muy embriagador; un paso más adelante en su black contemporáneo.

“The Descent”, ya nos muestra la evolución de la banda, con unos riffs apocalípticos y unas voces más agresivas a la vez que contundentes tras las que se halla, el creador de este proyecto R. Schmidt (compositor, guitarra, bajo y voces), que junto a Schermann en la percusión conforman un combo bestial. “Opulent Black Smog”, es más elegante y atmosférica en su primera parte, para transformarse por momentos en una oda al dolor, pero manteniéndose entre delirios de post black, antes de la vorágine “Burial Ad Sanctos”, directa y a la yugular, quizás de las más agresivas del álbum, todo un temazo.

“Inertia”, es otro claro ejemplo de cómo mantienen la esencia del primer álbum homónimo, pero le dan un salto más de calidad, siendo grabado y masterizado por John-Bart en Van Der Wal home Studio, una apisonadora sonora, recrudecida desde el abismo. “Ritual”, pone el toque instrumental, siendo la antesala de otra bestialidad, “A Material God”, donde los ritmos asíncronos de las guitarras en determinados momentos, dejan paso a unas melodías épicas y envolventes como un éxtasis entre flagelos.

“Ruin”, pone un poco de calma en el álbum, casi una instrumental entre notas agudas y pasajes cinemáticos, que se envilece en la parte final apareciendo la voz rasgada de Schmidt, compaginándola con los tonos más graves y que nos lleva hacia el cierre del álbum, “The Introversion of Sacrifice”, toda una epopeya al black contemporáneo, que deja su suciedad, para definir pasajes directos, con toques de black, de post y donde los riffs cabalgan para acentuar las estrofas y puentes, con una pizca de melodía y atmosferas. Muy buen álbum de WESENWILLE.