CAN’T SWIM (USA) «This Too Won’t Pass» CD 2018 (Pure Noise Records)
Por Cesar Luis Morales
Los americanos CAN’T SWIM nos presentaron el año pasado su segundo álbum llamado “This too won’t pass”. Bueno, pues otro álbum más de rock americano. Tampoco voy a decir más. Está bien grabado, bien producido, son buenos músicos y consiguen algunos estribillos que, sin ser de alto octanaje o altamente infecciosos, son correctos.
Todo el álbum suena así, compacto en su sonido. Pero ¿cuál es su sonido? Se me ha quedado un amalgama entre el Hard Rock, la vertiente más comercial del Punk, pero que tampoco llega a ser ese Punk-Rock contagioso o por el contrario, el Punk-pop de otras bandas americanas. Se me queda todo ahí en un batiburrillo de sonido, bien grabado, como he dicho antes y tal… pero… Un trozo de jugosa carne de res americana, bien cocinada, bien preparada y aderezada en su punto justo, crujiente por fuera, con un puntito casi cruda por dentro, todo muy muy apetecible, con su mostaza, con su kétchup, sus pepinillos y tal… ¡Y ya está! Se acabó, ya no hay más.
CAN’T SWIM estará muy bien para su público, que no dudo que lo tendrán, y que vayan y giren por muchos festivales pues es un sonido cómodo, fácil, asequible. Pueden aparecer en un festival de Rock, o en otros más alternativos, y habrá gente que los conocerán y corearán sus temas, pero…
En cuanto al tema de las letras, como ellos mismos declaran en su propia página web: las cosas no van a mejorar, no todo lo cura el tiempo y los problemas se desvanecen. El mal nos rodea y algunas veces, entra a formar parte de lo que somos. Así que CAN’T SWIM es una banda que vuelca las paranoias existenciales del vocalista Chirs LoPorto en un intento de catarsis
Esta banda canta a esa desazón, pero ¿cómo decirlo?, sosamente. Hay bandas que me pueden desgarrar el alma como la náusea de la que hablaba Albert Camus, y lo pueden hacer electrificándome de arriba abajo. NIN es otro producto netamente americano y son capaces de con un solo tema (“Hurt”, por poner un ejemplo) dejarme emocionalmente desolado. Pero claro, Trent Reznor es un genio y una de las personalidades más miserables que te puedes echar a la cara.
Lo siento mucho, habrán volcado todas sus mierdas existenciales y lo habrán hecho en un intento de catarsis, serán una banda sincera y honesta con un sonido genuino, pero a mí, ni fu ni fa. Va la puntuación que va por el respecto que hay que tenerle siempre a un músico y por eso mismo que han hecho: porque han tenido los cojones de sentarse a componer y a escribir y tocar una serie de temas, porque han volcado sus experiencias vitales y sus mierdas en una serie de temas. Todo eso está muy bien, pero que ellos lo hayan hecho bien y lo hayan hecho así, no significa que me tengan que gustar. Aun así, para aquellos que buscan un buen álbum de Hard Rock americano, sin muchas pretensiones ni complicaciones, pues esta banda les puede interesar. Si ahondáis un poquito en sus letras, quizá incluso encontréis un reflejo de alguna historia personal y la hagáis “vuestra canción”.
Yo sigo con lo dicho, a mí me emociona y me duele más el primer estribillo de “Hurt” de NIN que todo este “This too won’t happen” de CAN’T SWIM.
“I hurt myself today / to see if I still feel / I focus on the pain / the only thing that’s real”
Nota - 6.5
6.5
Nota
Todo el álbum suena así, compacto en su sonido. Pero ¿cuál es su sonido? Se me ha quedado un amalgama entre el Hard Rock, la vertiente más comercial del Punk, pero que tampoco llega a ser ese Punk-Rock contagioso o por el contrario, el Punk-pop de otras bandas americanas.