
Bueno, comienzo diciendo que tras los BEATLES, Liverpool no había dado nada bueno hasta la aparición de estas malas bestias… si, COLPOCLEISIS provienen de la tierra de Lennon, McCartney, Starr y el otro que no me acuerdo.
A diferencia de los del submarino amarillo, estos cuatro animales saben tocar sus instrumentos (ahora vendrá alguno llamándome exagerado o diciendo que soy poco objetivo… lo reconozco, lo soy).
La banda no es nueva, aunque es la primera vez que me enfrentó a ellos. Y es que con la enorme cantidad de grupos de este palo (y de otros, claro) que han surgido en las últimas décadas, es fácil perderse en el océano del Underground extremo. Llevan desde el 2015 metiendo caña y ni más ni menos que tienen dos demos y… ¡8 singles!, aparte de un primer disco del 2017 titulado “Fallopian Fallout”.
Seis años después de este debut, se han lanzado a la piscina y han sacado este “Elegant Degradation” y que el título no os engañe: de elegante, nada.
Coñas aparte, lo que nos ofrecen COLPOCLEISIS es un interesante Death Metal en su sección brutal y con bastantes reminiscencias Slam de la zona USA. Ritmos con una cadencia dinámica y rápida, con ciertos aires a cosas como EPICARDIECTOMY, ORGANECTOMY o KATALEPSY.
La batería es lo que más me ha impresionado, sin duda. Y es que el señor Lewis Candlin ejecuta unas partes enrevesadas y atroces con velocidad y mucha contundencia que quitan el hipo. Me ha recordado un poco al trabajo de Dave Culross en en DISGORGED o cuando estuvo 2 años en PYREXIA. La mezcla apabullante de partes a 1000 por hora con cortes secos es impresionante. Y el sonido a lata de la caja, que de siempre me ha parecido mucho más natural que los sonidos limpios de muchas grabaciones.
Por su parte, el buen trabajo de Ste Moses a las guitarras hace que el disco no se haga pesado. Sus influencias podrían ir de los mismos SUFFOCATION a cosas más Underground como CLEAN FLESH o GORGASM. Mucha intensidad y buenos punteos y una voracidad por las seis cuerdas que plasma perfectamente en los interludios de muchos temas.
Joe Mortimer nos deleita con unas machacadas a las cuatro cuerdas que también te pueden hacer babear, especialmente bien conjuntado su esfuerzo con el del antes mencionado Lewis.
Y el postre… bueno… si un esófago fuera capaz de emitir algún sonido, estoy seguro que ese es el de Jon Burr. Qué portento de tipo con las cuerdas vocales, aunque como digo, yo creo más bien que canta con las tripas. Me ha encantado y solo puedo recomendarlo si lo tuyo son cosas como CLEAN FLESH, DEVOURMENT o DISGORGE (USA). Una barbaridad.
El disco se compone de 11 temas a cual más atroz, con una técnica depurada, una variedad bastante importante y un trabajo de ensayo importante. Como bien nos tienen acostumbrados últimamente los grupos de brutal Death Metal, está peña debe dedicarle muchas horas a pulir los temas, las conexiones entre ritmos y a mimar el resultado final. Y os aseguro que COLPOCLEISIS son de esos.
Solo para fans de lo muy extremo y depurado. Si no, olvídate.
Puntuación
Nota - 7
7
Nota
Coñas aparte, lo que nos ofrecen COLPOCLEISIS es un interesante Death Metal en su sección brutal y con bastantes reminiscencias Slam de la zona USA. Ritmos con una cadencia dinámica y rápida, con ciertos aires a cosas como EPICARDIECTOMY, ORGANECTOMY o KATALEPSY.