[CRÍTICA] BRUTALITY (USA) «sea of ignorance» CD 2016 (Ceremonial Records)
Por: Alberto Bonoso Criado
Justo 20 años después de su tercer álbum “In mourning” con el cual nos dejaban el cuarteto floridano, BRUTALITY regresan con un nuevo largo que sucede a su EP “Ruins of human” que ya vaticinaba que seguían en buena forma. La formación presentada para el largo es la ya clásica, compuesta por; Scott Reigel a la voz, Jeff Acres al bajo y voces, Jay Fernández a la guitarra y la incorporación de Ruston Grosse a la batería. “Sea of ignorance” es el título elegido para dar forma a un Death Metal Old School que a momentos recuerda a su primer disco “Scream of Anguish” que, dicho sea de paso, es un discazo. El disco está producido por Ceremonial Record (2016) y consta de 8 temas.
El plástico me ha dejado una sensación agridulce debido a que presenta altibajos y avanza en línea descendente. A temas que pueden recordarnos a grupos como MONSTROSITY, HIPOCRISY, o a los de Florida en su primera época, realizando un Death metal old school de calidad, pasamos a temas insípidos y con exceso de melodía, con parada obligada en el séptimo corte, “Shores in flames”, una cover de BATHORY de su álbum “Hammerheart” que hace olvidar qué banda estás escuchando, aún estoy cavilando el sentido de incluir esta canción en el largo, rompe completamente con la estética presentada en los demás cortes, no supera a la original y para más inri dura más de 11 minutos, la más larga del plástico, incomprensible.
Encendemos motores con “Sea of ignorance”, buen comienzo que hace presagiar que podemos estar ante un álbum notable. Empezamos engrasando el doble bombo, seguimos para comprobar que Scott Reigel y sus guturales permanecen en buena forma, añadimos cambios de tempo, para terminar con un solo melódico más que aceptable.
“02.48 to 52” es el título de su segundo corte. Al contrario que el plástico este tema va de menos a más, aumentando de frenesí a medida que avanza, presentado riffs torcidos, una melodía como paisaje de lo más pegadiza, para acabar incitando al choque, a la violencia y siendo la antesala del que para mí es la mejor pista del álbum.
Nos detenemos en la pista de aterrizaje número 3, llamada “Fatal Cure”, discrepo con el nombre porque este corte no es una cura fatal, es ¡Death metal del bueno!, sin florituras ni experimentos, doble bombo a toda pastilla, blast beast tan característicos del género, al estilo “Litany” de VADER, riffs heterogéneos, solos compactos y un final rompedor. El mejor tema del disco con una duración de 3 minutos exactos.
Llegamos al cuarto tema del disco, “Tribute”, corte aceptable que empieza a evidenciar la línea descendente y repetitiva que comenté con anterioridad, pero que sigue siendo una buena canción, con una melodía que te evoca la degradación del ser humano llevada al mundo en el que vivimos, para crear una simbiosis de buen Death metal.
“Perpetual resolution”, quinto corte del plástico me ha recordado a algunos temas de la banda nacional AVULSED, por lo demás nada nuevo, en la línea de los anteriores, buenos ritmos, frenética a momentos, pero más de lo mismo.
Hacemos un salto en nuestra escala para dirigirnos hacia el corte número 7, “Shores in flames”, me encantaría una entrevista con el grupo para preguntarle el sentido de incluir esta cover de BATHORY en el álbum, mis conexiones sinápticas no son capaces de enhebrar una razón que les llevara a romper con la estética del plástico tan estrepitosamente, nada más y nada menos que más de 11 minutos de canción que te hacen olvidar que estás escuchando a BRUTALITY provocando que el nivel del disco descienda claramente.
Después de gripar los motores nos encontramos con “End of days” octavo y último corte del plástico, tema insípido con el olor a quemado provocado por el anterior tema en el cerebro. Mal sabor de boca para un mal cierre.
En general, álbum que apuntaba a notable pero que se queda en un bien alto. Death metal sólido, brutal, contundente, con bastante calidad a retazos pero que presenta repetitividad, altibajos, un corte inocuo y que deja al oyente con las papilas gustativas distorsionadas. Impresión de que podría haber llegado a más este trabajo.