[CRÍTICAS] ACRANIUS (DEU) “Reign of terror” CD 2017 (Rising Nemesis Records)
Por Santi Gzlez
Este es ya el tercer trabajo de estos alemanes expertos en destrozar cabs de guitarra. Llevan metiendo caña y palm mute desde 2009 y ojito, que sin innovar poco o nada se están metiendo ahí, en la escena slam brutal death, tan cerrada o por lo menos selecta, sobretodo por lo extremo de las propuestas. Sabes a lo que te enfrentas, no hay mucho margen, así que lo que haces tiene que entrar rápido sino no va a ser aceptado.
Y que os voy a hablar de extremo si sobre estas líneas tenéis la portada de este «Reign of Terror». Brutal. Podríamos estar diciendo adjetivos de este pelo durante un par de líneas, pero es que este estilo es así, extremo, llamativo y selecto.
Extremo también en un sonido que aún teniendo unas guitarras con el potenciómetro de gain a tope suenan claras, aplastantes pero claras, potenciadas por un bajo gordo donde los haya y una batería correctos en sonido, dejando hueco para todo el muro de sonido de cuerdas, pero no por ello en un segundo plano.
Todo está preparado entonces para que si te gusta el slamming le des una oportunidad y si no te gusta pases de esto como de la peste. Mucho me temo que si te gusta el estilo ya los conoces y entonces sabrás que este trabajo no es un paso adelante, es más bien un paso, sin más. Bien es cierto que en este trabajo de 10 temas y media hora de duración podemos encontrarnos con púas contrapua a toda velocidad pero lo que más hay aquí son ritmos y más ritmos para mover la cabeza y todo el puto cuerpo si tienes espacio. Palm mute brutales y machaque al máximo de acordes mono tono en los que el bajo hace una función impresionante de carácter arrollador. Rápidos y principalmente a medio tiempo, pero arrolladores y sobre todo muy muy rítmicos.
Quizás estos ACRANIUS están más influenciados por el hardcore que otras formaciones del estilo y posiblemente eso les haga más asequibles para la mayoría aunque seguro que más aburridas para los devoradores del estilo. Y es que en ocasiones la influencia es tan palpable que casi estamos ante una formación de lo que podríamos llamar brutal death slamcore. Ahí es nada, puesto que ciertos cortes y parones groove sin tan core como las formaciones más modernas del siglo XXI. Pero no nos llevemos a engaño ni por un momento. Párate y vuelve a mirar la portada. ¿La ves? Pues eso es lo que vas a escuchar.