[CRÍTICAS] MEGADETH (USA) «Dystopia» CD 2016 (Universal Music Group)
Por: Carlos Bermejo
Tres años después de su fallido intento con “Super Collider” ya podemos degustar el decimoquinto trabajo de estudio de los californianos MEGADETH, el cual sale al mercado de forma oficial el 22 de enero a través del sello discográfico Universal Music Group.
“Dysopia” consta de once cortes, incluida una versión en la última pista, para un total de algo más de cuarenta y seis minutos de Thrash Metal “made in DETH”, del que los seguidores de la formación del pelirrojo estábamos esperando, más aun después, como mínimo, de dos discos anteriores que fueron decepcionantes, muy decepcionantes. Por ello ya puedo anticipar que el álbum como mínimo es lo mejor que han editado en el siglo XXI.
En el disco debutan el virtuoso guitarrista brasileño Kiko Loudeiro (ANGRA) y el baterista no menos bueno Chris Adler (LAMB OF GOD), el primero de ellos sencillamente se sale en esta grabación y el segundo, bajo mi opinión, cumple bastante bien su cometido, recordemos que él mismo reconoció que tuvo que cambiar su estilo para adaptarlo a MEGADETH, nadie va a dudar que la calidad que atesora, pero si lo comparamos con lo grabado por Bostaph Y Benante recientemente, pues eso, cumple con el trámite. La grabación se ha llevado a cabo en Nashville por el propio Mustaine y Toby Wright (ALICE IN CHAINS, CORROSION OF CONFORMITY, MACHINE HEAD,…) y de la mezcla se ha encargado Josh Wilbur (TRIVIUM, LAMB OF GOD, KILLER BE KILLED,…) con un excelente resultado final, como nos tiene acostumbrado la banda.
En cuanto a la portada del disco he de decir que desde que la vi cuando la adelantaron y observé que Vic Rattlehead volvía a ser el protagonista, tuve el presentimiento que nos esperaba un gran disco, ya que no quise escuchar los adelantos hasta tener el disco completo, y mi intuición no ha sido fallida, estamos ante un disco soberbio, el dúo Mustaine-Louderio me ha vuelto a recordar a la etapa más clásica de la banda, en ocasiones, pocas eso si, durante el recorrido del mismo a la época de Chis Poland, aunque en líneas generales tiene bastantes tintes “Countdown to Extiction”, quizás por la similitud en la técnica de Marty Friedman con el brasileño. Con respecto al único superviviente de los cambios de músicos realizado por del líder de la banda, David Ellefson vuelve a estar brillante, como siempre, este hombre sabe cuál es su rol en la formación, y lo que tiene que aportar a la banda lo hace con nota alta, esto ya lo aprendió Dave Mustaine en “Endgame” y, cuanto más suena un disco a las raíces de la banda, más grande se hace el bueno de David. Con respecto al líder supremo he de decir que me ha sorprendido muy gratamente su aportación vocal al disco, después de haberlo visto varias veces en directo en los últimos años y oír su escandalosa bajada de tono, en este disco se asemeja más a la época de los noventa, no sé si será obra de los ingenieros en la grabación o si realmente ha mejorado, el directo será el juez de ello.
El disco abre con “The Threat is Real” que comienza con una voz femenina cantando en melodía arabesca y rompe con un riff inicial que sin duda hace que se dibuje una sonrisa en mi cara, ¡MEGADETH ha vuelto! Y también desde el principio se presenta el brasileño con una excelente melodía, brutal corte para abrir el álbum que consigue mantener tu atención sobre él y estar ansioso por oír la siguiente canción.
Acto seguido llega el cañonazo “Dysopia” corte que da título al álbum, y en el que el protagonismo lo tienen las guitarras sobre todo en las partes melódicas que dejan en un segundo plano a la pista de voz. También me gustaría destacar el cambio de ritmo existente en el solo de guitarra, que inevitablemente recuerda a la época de “Peace Sells…But Who’s Buying”.
“Fatal Illusion” es el corte donde David Ellefson saca toda su artillería pesada, no solo en las partes en que se queda solo su bajo, sino en la colección de enrevesados riffs que posee el tema, donde el bajista sencillamente lo borda. Este corte puede que no te diga mucho en la primera escucha pero, la colección de ritmos existentes en él lo convierte en uno de los mejores y más complejos temas del disco.
Turno para “Death from Whitin” y “Bullet to the Brain”, en estos temas no encontramos la velocidad ni los cambios de ritmo de sus predecesoras, son más bien medios tiempos, en las que podríamos destacar su estribillo, melódico y pegadizo, y mientras tanto, Kiko Loudeiro a lo suyo, a deleitarnos solo tras solo.
“Post American World” es la viene a continuación, un corte con riffs densos y doble bombo en cada estribillo que le dan el empaque necesario al tema, me hacen llegar a la conclusión de que es un buen tema, no de los mejores del álbum, pero una buena canción al fin y al cabo.
Con “Poisonous Shadows” encontramos el que para mí, es el mejor tema del disco, es un corte oscuro, inquietante, y no sólo con el mejor estribillo del disco, sino con el mejor estribillo de la banda en muchos años, además si una canción que no es rápida y teniendo una duración de seis minutos se te pasa volando, mala no ha de ser. Otro culpable de que este tema sea un trallazo es la aparición protagonista por primera vez en el disco de Chris Adler, su doble bombo en las partes cantadas es acorde al nivel que posee el baterista, da la impresión que aquí si, aquí el jefe le ha dado rienda suelta al baterista. El final del corte con el piano grabado por Loudeiro es simplemente genial.
El siguiente corte, “Conquer or DIe” se trata de un instrumental que comienza con guitarras limpias, en el que como podéis imaginar, deriva en una colección de solos de guitarra a cual mejor y finaliza con una grave voz en off que sirve de puente para otro de los cortes del disco, “Lying in State” literalmente te estalla en la cara, como recuerda a la primera época de la banda esta canción, sobre todo en las partes en las que el californiano prácticamente no canta sino que habla, esta composición corrobora que estamos ante un señor disco.
El único pero, se lo podríamos poner al corte que cierra su participación compositiva, “The Emperor” que sin ser un mal tema, dentro de lo que llevamos escuchado quizás sea el más lineal, que no por ello sea malo, es que después de oír el resto del disco, esta canción te puede dejar bastante indiferente. El álbum cierra con “Foreign Policy” versión de los americanos FEAR, ya sabemos de la afición del frontman de MEGADETH por el Punk, y por ello ha decidido cerrar esta obra maestra con este cover, llevado a su terreno, como ocurriera con “Anarchy in the UK”.