CZAR (USA) “life is no way to treat an animal” CD 2017 (Autoeditado)
Por Héctor Hidalgo Arévalo
¿Psicodelia? ¿Jazz? ¿Death? ¿Prog?¡¡¡¿¿Gind??!!! ¿Todo ello en un mismo disco? Pues sí, toda un mal sana mezcla de estilos musicales es lo que nos traen CZAR a través de las 19 pistas que componen su nuevo trabajo titulado “Life Is No Way To Treat An Animal”.
Los estadounidenses nos traen un trabajo que los encasillara en cierta manera a esos grupos con cierta rareza genérica y que con los que a su vez tiene bastantes similitudes como son el caso de CONVERGE o de DILLINGE ESCAPE PLAN.
Gran cantidad de temas forman esta obra, pero todos ellos de una duración relativamente breve. La pista encarga de abrir el disco será a su vez la más “comercial”, sin llegar a rozar el extremo en ningún momento y con un tono jazzy experimental muy curioso, este tema fue el que me hizo sentir verdadero interés por este grupo en una primera estancia, una mezcla de MR BUNGLE y PHANTOMAS realmente curiosa.
Poco a poco la cosa se va volviendo cada vez más loca y desenfrenada llegando ya a “Beware The Flies, Orestes” nos encontramos con un tema hardcore experimental al puro estilo CONVERGE con partes verdaderamente memorables.
La gran mayoría de temas son trallazos instantáneos de lo que se podría considerar como Grindcore progresivo, pero es en los temas más largos donde los CZAR consiguen desatar realmente toda su creatividad, pistas como “Vultures Never Eat In Peace” o “Mister Reindeer” son trallazos considerables y curiosamente de los que más duración de locura tienen.
El nivel técnico del grupo se ve claramente impecable a lo largo de todo el minutaje, virtuosísimos y ritmos quebradizos abundan en cada uno de los temas.
Locura desenfrenada es lo que nos esperará a través del set de temas que componen este trabajo, quizás pueda acabar desquiciando a las mentes y oídos poco acostumbrados a estos estilos de música centrados en el sonido extremo y experimental, pero seguro que a todo ese público adicto a la experimentación fascinara.
Por todo ello CZAR nos trae una pequeña joyita que pocos sabrán apreciar como se merece pero que sin duda alguna posee una calidad desbordante.