MORGAL (FIN) «Morgal» MCD 2018 (Werewolf records)
Por Cesar Luis Morales
MORGAL no significa nada en específico, simplemente es un nombre con el que el batería de la banda, SS Exiler, apareció una buena mañana de 2012. Queda aclarado para futuras referencias, pues es bien sabido que las bandas del Black Metal encontraron en la obra de J.R.R. Tolkien un vademécum para bautizar a sus criaturas. No, no tiene que ver nada con Minas Morgul, que en las lenguas de Tolkien significa “Torre de la Magia Negra”. ¡Colorea y aprende con Teo!
WEREWOLF RECORDS publican el nuevo trabajo homónimo de estos adolescentes fineses. ¡Y con este computamos ya el lanzamiento número 4758 en lo que va de mes! Porque el Black Metal escandinavo (zona de Noruega, Suecia, Finlandia y demás poblaciones limítrofes) tiende a ser prolífico… A ver, con toda lógica: poblaciones aisladas, nieve por todos los lados, cielo nocturno durante muchas horas al día o durante días completos, ¿qué hacemos? ¡Pues al local a ensayar! Por eso la gente como MORGAL nos ofrece lo que nos ofrece con tan solo veinte años… Como reza su carta de presentación: ¡0% Moral, 0% Law, 100% FUCK YOU! (¿Y con esa boca besas a tu madre?). Y lo que nos encontramos es el Black Metal de la vieja escuela (los MAYHEM de aquellos años, ¿recuerdas?) pero remozado a los años que corren, sin sorpresas, pero aun así, crepitante, furioso, rápido, sucio y no exento de musicalidad, enfermiza y retorcida, eso sí. No es malo que hagan referencias a otras bandas, pues queda claro que MAYHEM, sobrevalorados o no, fueron el hito y el espejo en el que todas las bandas tienen que mirarse.
MORGAL podrían destacar por su unión de lo viejo y de lo nuevo. Siguen todos los capítulos del manual del Blackmetalero al pie de la letra: sobrenombres escandalosos y truculentos (SS Exiler batería, Crusher guitarras, Lord Warmoon bajo y vocalista), corpse-painting, cinturones y muñequeras de tachas, cuchillos, logo casi ilegible con las correspondientes cruces invertidas… ¡Enhorabuena a la originalidad del lanzamiento número 4758 del Black Metal Escandinavo! Pero…
Y es que ahí está el tema, hay un “Pero…” Hay algo distintivo en MORGAL. Este nuevo lanzamiento no es sino una regrabación de algunos de los que ellos consideran sus mejores temas. Ahora los han grabado con mejores medios, con mejor técnica, más rápidos. Y es que estos veinteañeros ya sacaron un primer disco en 2016, “Käärmesielu” y sí, vamos a reírnos todos juntos, porque probablemente sea la peor portada de la historia de la música y del mundo, la más amateur y la más… ¡Bueno, no os hago más spoiler, descubridla vosotros mismos! Pero de cada nueva publicación, solo sacan veinte, treinta copias… Vale, la razón es que no tienen medios para sacar más copias, e imprimen tan pocas para los fans. ¿Pero cuánto paga ahora la gente por un, por ejemplo, “No Life ‘til Leather” de METALLICA? De todos modos, recordemos los casos de Les Légions Noires franceses: el grupo de músicos del Black Metal francés de lo más undergroud, que repartieron copias de su trabajo a amigos y colaboradores cercanos. El paso de la leyenda urbana al mito está ahí (si no sabéis de qué coño os estoy hablando, recomiendo la lectura de la mastodóntica obra de Dayal Patterson “Black Metal: Evolution of the Cult”). Así que, como digo, quien sabe si dentro de unos años la rumorología del momento dirá que MORGAL sacaron tan pocas copias de sus trabajos porque sólo los dignos podían tenerlas.
Por ahora ya tienen un contrato firmado con una compañía como WEREWOLF RECORDS y sacan este EP con cuatro temas: “Blood for Atazoth”, “Mistress of Blood”, “The Black Goddess” y “Warcry of the Vampire”, y la sensación es la misma que cuando escuché por primera vez los trabajos del Black Metal noruego, pero con la ventaja de que ya tengo un acervo cultural en la materia para poder comparar. Y sí, los chicos de MORGAL han seguido al pie de la letra el manual del Blackmetalero en todo. Llegando al capítulo 22, el de la composición músical y letrística, también lo han seguido al dedillo: SS Exiler toca a velocidad inhumana, metiendo los característicos blast-beats, el inmisericorde martillo pilón que lleva el ritmo, acompañado por Lord Warmoon al bajo y vomitando las letras a medio camino entre la autolesión vocal y la locura y las guitarras de Crusher enlazando riff tras riff en un compendio total que no cae en el caos sónico, pero que demuestra que los MORGAL son los alumnos aventajados de aquella escena. Y como digo, la sensación es esa: la de que nos encontramos ante el nacimiento de algo importante; oscuro, vicioso y demás apelativos que queráis atribuirle al Black Metal, sí, pero también, como he dicho, importante. Y sí, ya sabemos lo que nos vamos a encontrar, pero vamos a tener en cuenta de que tienen veinte años y tienen que evolucionar. Por ahora, de entre los 4758 lanzamientos del Black Metal Nórdico de este mes vamos a tener en cuenta este homónimo de MORGAL y, recordad que, si sois pacientes, del mosto más insulso puede salir un vino espectacular.
Nota - 8.5
8.5
Nota
Y lo que nos encontramos es el Black Metal de la vieja escuela (los MAYHEM de aquellos años, ¿recuerdas?) pero remozado a los años que corren, sin sorpresas, pero aun así, crepitante, furioso, rápido, sucio y no exento de musicalidad, enfermiza y retorcida, eso sí.