Por Nacho Peña
“The Great Herald Of Misery” es el cuarto trabajo de los franceses HEPTAEDIUM, un duo formado por Florent Lambert, encargado de todo el proceso musical, y el vocalista Mickaël Ratinuad.
Este conjunto de temas sale en formato digital y en un bonito vinilo de color blanco, con una buena portada (obra de Juan Manuel Orozco, ilustrador afincado en Costa Rica), hecho que merece la pena remarcar y que, para los amantes del vinilo, puede ser un aliciente más que justificado para su compra.
El estilo es una mezcla entre determinados ritmos a lo MESHUGGAH con toques muy STRAPPING YOUNG LAD, a lo que se une una buena dosis de sintetizadores espaciales para acabar conformando la particular visión musical de Lambert.
Los temas son, quizá, muy cortos para el estilo del que hablamos, pero también confiere una intensidad constante que no decae como pudiese pasar entre interminables minutos de polirritmias y múltiples arreglos.
Los sintetizadores le dan una atmosfera particular, que lo aleja un poco del típico Djent y, por si os lo preguntáis, no se abusa de ellos, están ahí cuando se necesita, no estando presentes a lo largo de toda la duración del corte.
Hay ocasiones, en determinados pasajes, que me ha recordado, en parte, a la época intermedia de IHSAHN creando determinados ambientes muy emotivos acompañados por una voz desgarradora pero emocional, que dan una vuelta de tuerca al trabajo.
Mención especial a las letras, con claro contenido de trasfondo, abstractas y con un toque tecnológico en su forma de mostrar las metáforas, diseñadas para hacernos pensar y, hablando en plata, curradas.
Nos encontramos, por tanto, ante un trabajo muy personal, elaborado, con un gran trabajo de artwork y esfuerzo por parte de Apathia Records ( en su versión vinilo), con buenas ideas, técnico, buen sonido y toques originales, que hará las delicias de los amantes de nuevas sensaciones, de lo progresivo, opresivo y atmosférico, y que la única pega es que se os hará corto.
Nota - 8.5
8.5
Nota
El estilo es una mezcla entre determinados ritmos a lo MESHUGGAH con toques muy STRAPPING YOUNG LAD, a lo que se une una buena dosis de sintetizadores espaciales para acabar conformando la particular visión musical de Lambert.
