Por Luis Martínez
El quinteto del País Vasco, KNIVES nos ofrece un nuevo EP, tras el álbum “The Blackest Noose” del año 2015, una nueva grabación compuesta por siete temas, una intro más seis temas, donde vuelven a darle una vuelta a su estilo mezclando varios estilos de los que son fanáticos estos músicos, como el antiguo Death Metal de corte sueco, el Punk, el Crust o, incluso, ciertos riffs más rockeros. Para hacernos una idea sencilla, algo más macarra de lo que era ese “Wolverine Blues” de los suecos ENTOMBED, y la mezcla, doy mi palabra de que funciona a la perfección, este EP se hace tremendamente adictivo con cada escucha y cada vez que los temas comienzan a sonar, los riffs son sencillos, y tremendamente pegadizos, no es una banda que se complique la vida con demostraciones de habilidad instrumental, el estilo es lo que es, y aquí se trata de hacer canciones buenas, que se escuchen y nos ofrezcan una mala leche tremenda, que se nos queden grabadas en nuestra mente y podamos cantarlas, gritarlas y desfasar mientras suenan. Todos los músicos cumplen de sobra con su cometido, todo suena compacto, agresivo, macarra, pegadizo y a ello se le añaden melodías y potentes coros que realzan determinados temas que se hacen muy atractivos.
El sonido es tremendamente bueno, con unas guitarras tremendamente abrasivas y afiladas, no descansan un momento y ofrecen buenos riffs, con un sonido “made in HM-2” ruidoso y chirriante que le da ese ambiente nórdico tan característico. Desde la intro, basada en sonidos orientales, se desata un verdadero torbellino que no da descanso, con una batería muy nítida y clara en todo lo que nos ofrece y variando los ritmos perfectamente según nos lo vaya solicitando el tema en cuestión, tenemos partes rápidas, otras más d-beat (“Carrion Culture”, “Ride The Kali-Yuga”), otras más clásicas e incluso algún “Blastbeat” (“Death, Death, Death”) que imprimen una agresividad inmensa. Un bajo demoledor, con un sonido grave y que llena todo ese vacio que nos dejan estas guitarras tan afiladas. Voz potente, y tremendamente variada, y tanto utiliza una tonalidad más aguda y chillona, como otra más potente, desgarrada más propia del punk/HC antiguo, como otros fraseos más oscuros y guturales o incluso limpios (“Mythos of Christos”), muy buen trabajo y que da variedad a cada tema y a la grabación en particular. Un perfecto ejemplo de esto lo tenemos en mi tema favorito del álbum “Death, Death, Death”, todo un himno para estar tarareando durante todo el día… tema con varias atmosferas que es perfecto! Aunque “Mythos of Christos” es otro cañonazo en plena línea de flotación que golpea a base de mala hostia y velocidad. Sorprende el oscuro “Coagula Alpha, A Silver Thread”, por su tenebroso y lento riff, con el añadido de piano y una melodía de guitarra final muy siniestra que cierra la grabación.
Muy buen disco el que nos ofrecen KNIVES, en donde la única pega que le encuentro es que se hace excesivamente corto, pero si lo tuyo es el Death´n´Roll, con muchísima marcha, coros potentes para gritar a pleno pulmón y composiciones pegadizas, no dejes escapar este “Superiorem Status Spiritualitatis” porque no te va a defraudar en absoluto.
Nota - 8.5
8.5
Nota
Muy buen disco el que nos ofrecen KNIVES, en donde la única pega que le encuentro es que se hace excesivamente corto, pero si lo tuyo es el Death´n´Roll, con muchísima marcha, coros potentes para gritar a pleno pulmón y composiciones pegadizas, no dejes escapar este “Superiorem Status Spiritualitatis” porque no te va a defraudar en absoluto.
