Por Juan Angel Martos
Desde el país vecino, Portugal, y más concretamente su capital Lisboa, nos llega lo nuevo de LÂMINA, “Lilith”, editado a través de Raging Planet, el cual ha sido grabado, mezclado y masterizado en Pentagon Audio Manufacturers por Fernando Matías. Con un artwork oscuro y psicodélico, entronizando a Lilith en una estructura geométrica triangular de la mano de Sérgio Pratas da Costa, nos presentan un stoner, con toques psicodélicos y doom muy interesante.
“Cold Blood”, abre el álbum, con una fuerte presencia del bajo de Filipe Homem Fonseca, que capta la esencia de la percusión de Katari, para desarrollar una estructura pesada a base de riffs de guitarras machacones e hipnóticos de la mano de Sergio Costa y Vasco Duarte, este ultimo también pone la voz. Voz repleta de matices ochenteros, sobre todo a BLACK SABBATH, pero centrados en un stoner denso y oscuro. “Big Black Angel”, parece salir de las melodías del primer corte, pues ambos son parecidos en el planteamiento, aderezado con un toque muy rockero y unas estrofas muy magnéticas, un gran corte, que deja paso a “Evil Rising”, otro corte contundente, con un solo potente y místico en la parte central, que junto a la voz se transforma en un ente en sí mismo.
Pero si algún tema de LÂMINA, es doom y stoner, ese es “Maze”, una pequeña obra dentro del álbum, con más de veinte minutos de duración, que comienza con un desarrollo lento y pausado, repleto de atmosferas oscuras, donde la instrumentación nos va dando toques de variedad en su estructura. Un corte que puede convertirse en una experiencia extrasensorial si conectas con él, en el que la parte central es acelerada y brutal, poniendo todo el énfasis en el rock psicodélico. Rock, que se mantiene en “Psychodevil”, sobre todo por el sonido chord del teclado que suman al tema, otorgándole un aire retro muy bailable, excepto la parte central donde otorgan prioridad a una parte muy onírica, construida a base de efectos en la guitarra. El cabalgar stoner de “Education For Death”, nos lleva al cierre del álbum, donde “In The Warmth Of Lilith”, se transforma en toda una oda, atmosférica, oscura y melancólica. Un corte pesado de doom muy bien estructurado, que tras una breve introducción mágica, deja paso a los riffs pesados y largos de un corte donde la mentalidad del individuo realizará un viaje astral al abismo, en el corte más doom del álbum. Quizás sea el tema que más me ha llegado del LP, por su carácter embriagador.
LÂMINA, es una buena apuesta portuguesa de stoner/doom, que debuta con este su primer álbum haciendo las cosas muy bien y transmitiendo con cada corte ese toque ochentero donde el resurgir de la lirica goticista le aporta una pizca de Lovercraft y Poe. Temas como, “Cold Blood”, “Evil Rising” o “In The Warmth Of Lilith” te harán pasar un buen rato.
