Por Juan Angel Martos
Otro gran producto que nos llega desde Italia, más concretamente desde su capital Roma, el nuevo trabajo de SHORES OF NULL, “Black Drapes For Tomorrow”, editado por Candlelight/Spinefarm Records. Detrás de este álbum se encuentra Marco Mastrobuono, ( FLESHGOD APOCALYPSE, HOUR OF PENANCE), el cual se ha encargado de la grabación, master y mezcla, dotando al álbum de un gran sonido. Si te gustan grupos como KATATONIA, AMORPHIS, INSOMNIUM… este álbum te va a gustar.
Tras una introducción instrumental, “Tributary Waters”, donde las guitarras y los coros nos llevan a la epicidad, se une “Donau”. Lo primero que resalta es la voz a cargo de Davide Straccione, limpia, melódica y por momentos profunda, ayudada por los coros y voces de los guitarras Babriele Giaccari y Raffaele Colace (guturales). En los screams, el bajista Matteo Capozucca también hace su trabajo. El tema en cuestión, recoge la esencia del grupo, metal gótico con toques doom, alternando voces limpias y guturales, donde las melodías de las guitarras recrean una atmosfera oscura, pero con toques de luz. Todo esto queda remarcado en “Tide Against Us”, donde destaca la percusión de Emiliano Cantiano y los riffs demoledores y épicos.
“House Of Cries”, acelera desde el principio con sus blast beats, pero rápidamente nos introduce en un mundo melódico, gracias a la tonalidad y a la dualidad de sus voces limpias, las cuales priman en la mayoría de temas y le dan un toque original y místico, un temazo. A mediados del disco nos encontramos con otro corte instrumental, “The Enemy Within”, esta vez presidido por el sonido acústico de las guitarras, dando paso a “Carry On, My Tiny Hope”, un corte que empieza con ritmos doom, pero que rápidamente se acelera, con el doble bombo, además de contar con unas voces limpias más rasgadas y agresivas que el resto del álbum, transformándose en un corte repleto de energía y de los mejores del disco. Ese toque doom y oscuro que aplican en su álbum, se certifica en “We Ain´t Ashes”, quizás su corte más lóbrego y denso.
La parte final del álbum, está marcada por “A Thousand Storms”, donde el metal gótico reflota en su estructura, contando con un estribillo gutural y acelerado que te hará vibrar a cada paso y giro que da la estructura y “The Kolyma Route”, onírica, con un toque más metalero en las voces, el cual le aporta un toque de distinción y nos trasporta a una estructura vibrante y cambiante. El cierre lo pone otra instrumental, “Death Of A River”, intimista y meditativa.
SHORES OF NULL, nos traen un disco cargado de buen gothic metal con toques doom, donde las melodías y la voz limpia marcan la línea a seguir, encontrando temazos como, “Tide Against Us”, “Carry On, My Tiny Hope” o “A Thousand Storms”.
