Por Santi Gzlez
Podría parecer que una banda que empezó haciendo black metal allá en el 2000 y que ahora trabajan bajo los cánones del death grind, no es una banda que tiene una tónica, una dinámica o que no tiene unas ideas claras. En el caso de los francesas BENIGHTED, y a lo largo de sus ocho trabajos, el salto de álbum en álbum ya no extraña a nadie y el resultado final en este «Necrobreed» debería de callar las bocas de todo el mundo, como digo, si es que alguien es capaz de hablar mal de su trayectoria. Liberémonos pues de prejuicios y disfrutemos de un trabajazo de delicatessen extrema. Doce temas de bestialidad, de guitarrazos death grind elaborados de manera magistral y en los que su mezcla mágica de estilos da un groove violento y afilado al resultado final que no hace más que llamarte al desenfreno de temas creados para el directo. Pero no nos perdamos los demás instrumentos por dejarnos llevar por las extremas guitarras de ferocidad y virulencia. La voz de Julián Truchan tiene una variedad y una dinámica que no es habitual ya no solo en trabajos de grind, sino en trabajos de metal extremo en general. Por favor!!!!! ¿Qué tiene este hombre en la garganta? No descansa un momento pasando una y otra vez por todos los registros. Growl, gorrinillo, agudísimos alaridos, gritos desquiciantes, medios tonos escandalosos…. El da toda la variedad que pudiera faltarle a este estilo mientras las baquetas de Romaní Goulon le dan la maestría instrumental y técnica para realizar un trabajo de baterías bestial, impecable y derrochando energía. Todo ello con una producción destroza cabezas. Brillante, limpia y extrema al mismo tiempo, mezclando la suciedad de los riffs grind con el grosor de los riffs death y con la empujes devastadores y groove de la mezcla de estilos, para que todo quede en su sitio, ni delante ni detrás, y puedas escucharlo todo. Prepárate para un CD veloz, rabioso, potente, variado y que escucharas de principio a fin si poder estarte quieto ni un momento.
