[CRÍTICAS] FEAR FACTORY (USA) «Genexus» CD 2015 (Nuclear Blast records)
Crítica: Eduardo Rodríguez
El cuarteto angelino FEAR FACTORY es una de mis bandas favoritas de cuando era un chaval. El “Demanufacture” es uno de mis discos fetiche. Lo considero imprescindible en cualquier colección y hasta el “Archetype” de 2004 me gustaron cada uno de sus trabajos y respeté el que intentaran evolucionar en algunos aspectos. Luego llegó la “desbandada” y los siguientes tres trabajos me han aburrido a pesar de no ser malos discos. Así que, a ver cómo se presenta este “Genexus”, su décimo trabajo de estudio. Por cierto… llevan casi una década sacando portadas similares hasta el exceso.
Escuchando un par de veces este nuevo trabajo se me hace difícil desgranar cada canción como a mí me gustaría y es harto complicado destacar algo. Y esto ocurre por varios motivos. El primero es que la propuesta es muy plana, los recursos son los de siempre y porque cualquiera de las canciones que aquí se incluyen pueden formar parte del track-list de sus anteriores tres cd’s: “The Industrialist” (2012), “Mechanize” (2010) o “Transgression” (2005). Incluso podemos hacer el experimento de intercambiar temas entre esos tres y este “Genexus” y el resultado sería el mismo. Aunque bueno, esto mismo le pasa a AC/DC y la gente sigue bebiendo los vientos por ellos…
La inclusión de un nuevo batería de técnica descomunal como lo es Mike Heller no aporta nada (como ya pasó con el gran Gene Hoglan) porque se limita a ser un sucedáneo del pionero en estas lindes Raymond Herrera. Tampoco noto que el bajo haya ganado en pegada con el último miembro en unirse, el carismático Tony Campos (Static-X, Asesino, Soulfly,…) ¿De qué te sirve tener a unos músicos de tan contrastada calidad si los vas a limitar a seguir tus riffs, ¡eh! Señor Cazares?
Temas como “Autonomous Combat System”, “Dielectric”, “Soul Hacker”, “Protomech” o “Expiration Date” (el típico track “fearfactoriano” atmosféric con voz limpia que suelen incluir) no están nada mal, pero es que parece una especie de grandes éxitos de su carrera (y sin ninguna gracia). ¡Demonios, si hasta han incluido dos remezclas electrónicas!… otra vez…
El caso es que no es un mal disco, ni mucho menos. Es un trabajo excelentemente producido plagado de metal de fácil escucha y de calidad. Entonces te preguntarás ¿cuál es el problema? Pues es que parece una banda imitando a FEAR FACTORY… bueno, ni eso, porque éstos tendrían más alma al ejecutar los temas. Álbum aséptico e inofensivo.