[CRÍTICAS] GRAVEWURM (USA) «Doomed to eternity» CD 2016 (Hell’s Headbangers Records)
Por Robin RM
Desde Ohio, Estados Unidos, llega esta veterana banda que aquí nos presenta su nuevo trabajo, titulado «Doomed to Eternity» que ha editado Hells Headbangers Records (INQUISITION, NUNSLAUGHTER, PROFANATICA…), sello al que regresan después de haber editado en 2010 su álbum «Blood of the Pentagram» y posteriormente en 2013 «Infernal Minions».
A algunos, puede que este trío les suene debido a que grabaron hará unos años ya, concretamente en 2007, un split junto a los guipuzcoanos DAEMONLORD. Pues bien, tanto si la respuesta es afirmativa como negativa, decir que GRAVEWURM es un grupo de auténtico Black/Death Metal, sin influencias de combos contemporáneos y basado en las formaciones de la vieja guardia como pueden ser CELTIC FROST/HELLHAMMER, SODOM, GOATLORD, VENOM…
El sonido de este lanzamiento es bueno, nítido pero algo sucio al mismo tiempo, entretanto los temas poseen cierta variedad dentro de su propuesta, algunas influencias Death Metal por aquí, otras Thrash por allá…aunque en su mayoría se encaminan hacia el Black Metal y no sólo por el tipo de voces rasgadas sino también por las atmósferas y sentimientos creados, no esperes eso sí, encontrarte con las típicas influencias de MARDUK/DARK FUNERAL, DIMMU BORGIR, SHINING o WATAIN. Vale que haya algunos altibajos a lo largo de su duración o las composiciones no rebosen originalidad sin embargo, no hay muchos peros que indicar, es sencillo, o te gustan o no.
«Fangs of the Serpent» es estupenda para darle algo de ejercicio a tu cuello, a medio tiempo pero agresiva y con algunas influencias clásicas innegables. Algo similar sucede con el siguiente «The Abyss Calls and I Shall Answer», demostrando su pequeña fórmula de buenos riffs, canciones cortas pero directas y eficaces. La quinta pista, «Bury My Coffin» es lenta y depresiva, de tempo sosegado…no llegaría a decir que es enteramente Doom Metal pero sí que tiene influencias del estilo, no obstante, no olvidemos que esta formación empezó sus primeros pasos siguiendo la estela de grupos como PARADISE LOST, ASPHYX, SAINT VITUS… Tampoco me podría olvidar del corte más épico de este larga duración, «The Wolves of Isengard» o la que pone título al disco, la sombría «Doomed to Eternity», en la que podemos escuchar la mayor cabalgada y los momentos más rápidos del plástico.
Este álbum tiene la particularidad de que es la última obra grabada por Jim Sadist/Lord Mazillion (alias Jim Konya), batería de los norteamericanos NUNSLAUGHTER quien falleció el pasado año, al que aquí acompañaban Von Sligow al bajo y por supuesto el líder y alma mater de este combo, Funeral Grave (alias Kevin Fye) a las guitarras y voces.
11 temas en la tradición de la banda que discurren en algo más de 35 minutos, editados a finales del 2015 y dirigidos a los adoradores del auténtico, honesto y oscuro viejo metal de los ochenta.