Por Cesar Luis Morales
Birmingham, ciudad del Reino Unido, en el condado de las Midlands Occidentales, fue conocida, durante la Revolución Industrial como “El Taller del mundo” o “La Ciudad de los Mil Oficios”. Por fortuna para nosotros, allí se cortó las puntas de los dedos en un accidente laboral un jovenzuelo llamado Tony Iommi, lo que le llevó a tocar la guitarra de una manera particular generando así el sonido Heavy Metal. ¡Colorea y aprende con Teo!
Y de allí también salieron, en concreto en 1987, los NAPALM DEATH con su primer álbum, “Scum”, inaugurando el nuevo estilo que rompió moldes, el Grindcore. A fecha de hoy, ¿Qué banda tiene el record Guinness de la canción más corta, sino estos salvajes al grabar el “You Suffer” de 1.3 segundos?
Ahora bien, ¿Cómo valorar un disco de Grind? ¿Cómo o qué se valora en un disco de Grind? ¿Qué valoramos: la brutalidad, las afinaciones graves, la velocidad, los growls y los pig squeal? Porque casi se podría decir que el Grind es la última frontera entre lo musical y el puro ruido. Pero, seguro, seguro, que se lo pasan de vicio grabando estas aberraciones sonoras.
Tal es el caso de DEFECAL OF GERBE, un trío de Montargis, compuesto por los hermanos Chaigne (Dave a la guitarra y las voces y Mickael, al bajo y también voces), junto con el batería Hervé Motté. De primeras contemplemos la portada y el título del disco: “Mothershit”, una parodia del recopilatorio “Mothership” de LED ZEPPELIN, pero en vez de los míticos símbolos de la banda británica, la cara de un cerdo, un ciruelo (polla, pene, tranca,… ¿está claro?) En vez del zepelín de la portada del “Mothership” un zurullo de dimensiones gigantescas. Esto es lo primero que te encuentras, la carta de presentación. ¿Y qué te encuentras dentro?
El recital sónico de DEFECAL OF GERBE es Grindcore, GoreGrind o como quieras llamarlo. En el Molestómetro marca ACME puntúan bastante alto, pues la música es un borroso y sostenido flujo de riffs y blastbeats tocados a toda castaña. Lo que se puede esperar de una banda de Grind, pero ahora añadamos la sofisticación y el glamour tan francés. Porque los títulos no se quedan atrás con lo dicho al principio: que se lo han pasado teta grabando este disco y se han reído de todo y de todos: «Sympathy For the Débile» no tiene nada que ver con los ROLLING STONES (¿o sí?); «Once Upon the Crotte» tampoco tiene nada de relación con los DEICIDE (y dicho sea de paso, para los no francoparlantes, crotte es un zurullo o mojón). Lo mismo podemos decir de «Leffe For Dead», que tampoco tiene que ver con DEATH ANGEL, pero cualquiera nos tomaríamos una Leffe con estos terroristas sónicos. Y la lista de aberraciones sigue hasta los 17 temas y 43 minutos de duración, con delirantes títulos como “Madame Richard in the Land of Fist”, “Abbath loves Friskies” o «Diarrhée mousseuse». ¿Diarrea espumosa? Como os he dicho: todo el glamour y sofisticación francesa tocados a velocidad sublumínica para abrasar el Molestómetro de vuestros vecinos.
DEFECAL OF GERBE y su “Mothershit” son Grind, y ya está todo dicho. No busquéis largos o increíbles desarrollos instrumentales, sesudas reflexiones líricas o musicalidad. Aquí todo es abrasión por la mera abrasión, velocidad por la mera velocidad y distorsión por la mera distorsión, que para eso es Grind y lo que aquí se hace es subvertir la música. Y si no te gusta, pues vete a escuchar un disco de ___ (rellénese por el interesado con la banda que más odie).
Nota - 8
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Nota
Aquí todo es abrasión por la mera abrasión, velocidad por la mera velocidad y distorsión por la mera distorsión, que para eso es Grind y lo que aquí se hace es subvertir la música.
