Por Santi Gzlez
Aunque estamos hablando de un trabajo de apenas media hora, este «Génesis» cuenta con ocho temas en su interior. Editado a través de LACERATED ENEMY RECORDS. ¿Necesitas algún dato más para saber por dónde van los tiros? Ah, si, claro, observemos la portada, los detalles, la distribución de los colores y la creación de monstruos de animación destructiva. Ahora ya si, ¿verdad?
Estamos ante una verdadera maquina de devorar brutal death de corte realmente moderno y técnico con una grandísima base de Slam.
La media hora, pese a la barbarie que estamos escuchando, se pasa volando y eso es gracias en gran parte a la producción que es gorda y densa, pero nítida. Con unas guitarras cuidadísimas, con una distorsión potente pero más profunda que higain y un bajo que pese a no estar muy presente marca bien su valor. Lo peor sin deuda es una batería muy procesada, demasiado sintética. No queda fuera de lugar, todo lo contrario, pero es que tanto en sonido como en edición el trabajo ha sido excesivo haciéndola sonar poco natural. Aún así nada que haga desmerecer este trabajo, lo que no quita que una batería humana haría ganar aun más enteros al trabajo.
Como decía, pese a ser un trabajo potente y extremo, la primera vez que lo escuché me lo puse dos veces seguido gracias a lo adictivo que me resultó. Su brutal death es de corte muy técnico, muy moderno y saben crear atmósferas con partes más lentas, temas instrumentales y melodías con armonías de guitarra dobladas, algo totalmente inusual. Mas aun teniendo en cuenta que cuenta con ciertas influencias slam ¿como hacen esto? Pues principalmente con un grandísimo despliegue de técnica, haciendo así un trabajo que a partes iguales es brutal y technical, y además sabiendo diferenciar estas partes de manera sublime en cada tema. Por si esto nos carga demasiado, también lo hacen por temas, de forma que ciertas canciones escuchadas por separado tienen una estructura totalmente diferente entre sí. Esto sin duda hace un disco variado, pero en ocasiones rozando demasiado la pérdida de perspectiva de conjunto.
Ya he hablado del grandioso sonido de guitarras para poder escuchar todos los riffs técnicos, despliegue de armonías y perfección en la ejecución de bases a toda velocidad. Pero resalta en el trabajo, pese a quedarse en un segundo plano y un poco atrás en la mezcla, la línea vocal. Aunque el CD tiene grandes partes sin ella el uso que hace de los ultraguturales, su mezcla con otra voz más chillona y screamer es una pasada, brutal, desquiciante y aplastante. Da otro sentido a este trabajo sin duda, pues no se corta en varias tonos, entonaciones y chillidos de diferente nivel. Dos vocalistas para este menester, y esto se nota, y mucho.
Estos cuarto animalitos se han marcado un CD debut que es para eso, para enmarcarlo.
