FINAL COIL (GBR) «The world we left behind for others» CD 2019 (Worm Hole Death)

Por César Luis Morales

Cantaba Rob Halford, allá por 1980, aquello de “Breaking The Law”. Por aquellos entonces, se interpretó como un himno de rebelión, de un hombre aburrido de su monótona vida diaria y que quiere acabar con ella. Con el paso de los años, cuenta la leyenda, que ese tema fue uno de los muchos temas en los que, de manera soterrada, Halford hablaba de su homosexualidad hasta que en 1998 decidió hacerla pública. ¡Colorea y aprende con Teo!

Si hay una cosa que hace bien todo lo que lleve la etiqueta “Post” es precisamente eso, romper la ley. Si tenemos cualquier estilo, el Post se dedica a empujar los límites establecidos hasta crear una nueva vertiente y siempre hay músicos que, si bien son respetuosos con las leyes estilísticas establecidas, están dispuestos a ir un poquito más allá. Para nuestro beneficio y deleite.

FINAL COIL pertenecen a esa categoría de músicos y con su último álbum, “The World We left behind for others”, han alcanzado una madurez compositiva digna de elogio. Tres EP’s, un primer larga duración en 2017, “Persitence of Memory”, y ahora este discazo, una obra conceptual que es como una isla en este mar de lanzamientos insulsos y fácilmente desechables.

A través de las doce pistas que lo componen, la destreza compositiva de Phil Stiles se hace patente dando como resultado un disco complejo, balanceado, que no es para escucharlo y olvidarlo. No, aquí tenéis que escucharlo con las orejas bien enhiestas, pues es un álbum conceptual, dedicado y delicado, complejo y, aun así, dinámico… que os va a transmitir las emociones que necesitáis en el momento adecuado, dejándoos el alma emocionada o estremecida hasta la médula, según quieran FINAL COIL. Abren el álbum con una alucinante introducción, “Ash’s”, sonidos programados y una increíble y evocadora melodía de guitarra. Sin apenas transición distinguible, siguen con “The last Battle”, primer tema y ya empezamos a viajar con las reminiscencias de TOOL y esas melodías de guitarras ululando a base de wah-wah. Pero el manejo de riffs y de ambientes tan característicos del Post, esos largos desarrollos basados más en la melodía que en una pared de riffs, aquí son elevados al Olimpo por el buen hacer de la batería del músico de sesión Barry French y la presencia tan notoria del bajo de Jola Stiles. El mesmérico inicio de “Scattered Dust” es minimalista pero efectivo 100% con las dobles armonías vocales a cargo de Phil Stiles (voz principal y guitarra rítmica) y Richard Awdry (guitarra solista y coros) (uno de los aciertos más grandes y uno de los principales incentivos de este álbum). Pero es que el disco sigue creciendo y evolucionando con cada tema: “Take me for a walk” es una simple melodía de guitarra duplicada con distintos efectos que te hace embarcar en un viaje lisérgico para seguir con “Empty Handed”, riffs gordotes con un sustain que reverberan en tu cráneo manteniendo la tensión y la dinámica que te hace seguir escuchando este “The World We left behind for others”. “Convicted of the Right” entra con la melancólica voz de Stiles pero arropado por la constante guitarra y las melodías embriagadoras, con un toque muy TOOL, pero donde vuelven a meter una serie de sonidos pregrabados que le dan otro aire y un solo de guitarra simple pero efectivo.

“Ashes ashes” es otro temazo, con un brutal inicio a base de piano, unos breaks de bateria y las limpias voces dobles… Es otro de esos temas cortos, que van intercalados a lo largo del disco y le proveen de un equilibrio perfecto entre largos desarrollos más post y estos breves interludios. Breve nota culinaria: entre pieza y pieza de sushi, se debe de comer una breve porción de jengibre, que te limpia la boca del sabor de la anterior pieza y te deja preparado para la siguiente delicatesen. Pues aquí, los  FINAL COIL hacen lo mismo: “Ashes ashes”, o “One more drink…” o su continuación, “… And I’ll leave”, son esos pequeños trozos de jengibre, pero llevados a la excelencia. Van finalizando el disco con “Imaginary Trip”, abriendo con ese melancólico piano y una melodía arrastrada a lo SOLSTAFIR, mostrando una vez más que pueden tocar todo lo que les venga en gana y les apetezca y no se van a encasillar. Y cerrar, cierran este conceptual “The World We left behind for others” con un tema homónimo que no es sino una amalgama de todas las maravillas relatadas anteriormente.

FINAL COIL posiblemente puedan ser incluidos dentro de lo que puede ser denominado como Post-algo, pero han venido, como cantaba Halford en los 80’s, a “Romper la ley”, para nuestro beneficio y deleite.