Por Luís Martínez
Desde la prolífica escena chilena y a través del sello español MEMENTO MORI Nos llega el álbum debut de SOULROT. Una banda formada a principios de los años 90, pero que tras un larguísimo paréntesis volvió en el año 2013 gracias a JL Olmos (guitarras), que recuperando sus ansias de ofrecer excelente Death Metal de la vieja escuela, resucitó la banda junto a JH Wilshchrey (bajo y vocales) y DE Fredes (batería).
Las raíces de la música de SOULROT están perfectamente ancladas y fuertemente agarradas al Death Metal nórdico de principio de los 90, bandas como ENTOMBED / NIHILIST, GRAVE, CARNAGE, DISMEMBER, NIRVANA 2002,… nos vendrán a la mente al escuchar este su álbum debut. Para hacer las influencias todavía más palpables, incluso para la grabación de las guitarras se escucha el sonido característico del BOSS HM-2, logrando una similitud con las bandas arriba mencionadas realmente evidente. Está claro, que originalidad SOULROT no ofrecen, tampoco considero que los seguidores de este estilo a estas alturas busquen eso, con los grandes del género ya desaparecidos o alejados del sonido de sus inicios, todos los seguidores buscan bandas que ofrezcan una experiencia similar en cuanto a sonido, podredumbre, oscuridad… y sobre todo, buenas canciones, atmosferas tétricas y agresividad. En eso SOULROT han logrado una grabación destacable.
El sonido de “Nameless Hideous Manifestations” es muy bueno, cada instrumento se aprecia con total nitidez, destacando el sonido de sierra eléctrica de las guitarras, un bajo que aporta la pesadez y graves que un tipo de Death Metal de la vieja escuela como este necesita y la batería que suena verdaderamente orgánica y real. La voz de JH Wilschrey es cavernosa y oscura, sin ser excesivamente gutural, su trabajo aportando la oscuridad y agresividad a cada tema es destacable.
Este debut nos ofrece 10 temas con una duración media de entre 3 – 4 minutos, aunque haya un par de ellos que llegan a los 5 y una corta introducción de apenas medio minuto, donde somos golpeados con un pútrido, pesado, purulento Death Metal donde no faltan los ritmos rápidos, algún blastbeat que se contraponen a otros ritmos más dbeat, crust o incluso partes más Doom, donde las armonías de guitarra destacan creando líneas más misteriosas. Destacar temas es complicados porque todos llevan una misma línea y de similar calidad pero el inicial “Those Who Dwell in the Abyss”, “Ectoplasmatic Revelations” o “Blackstone” son buenas muestras de Death Metal bien hecho, por nombrar alguno.
Sin duda, otra muy buena edición de este sello nacional, que continúa con su cruzada de ofrecernos verdadero Death Metal de corte oscuro, purulento, pesado y sobre todo de calidad.
Si bien con el reviews estoy muy pero muy de acuerdo, refiriéndose a que su estilo no es original, pero el disco es muy bueno, claramente las influencias de los grupos ya nombrados, le sumaria también Sorcery, mi nota eso si seria 9.5 y es porque se me hace corto el disco.
Excelente disco no cabe duda que las influencias son certeras pero tambien teniendo en cuenta que una banda debe tener dichas influencias pero sonando diferente con esto no quiere desmerecer nada en conclusión me gusto el disco desde que empezó la batalla de las guitarras 9.5/10