CORPUS OFFAL (USA) «Corpus Offal»

Tuve la ocasión de ver a Jesse Shreibman, batería de CORPUS OFFAL, durante el Kill-Town Deathfest del año 2023 y además en 2 ocasiones, en su set con AUTOPHAGY y en el cierre del festival con BELL WITCH, dos bandas completamente diferentes entre sí, los primeros haciendo Doom/Death Metal del más tocinaco y B. W. con su Funeral Doom agónico y desesperado.

Este chaval es una auténtica máquina, lo mires por donde lo mires. En ambas bandas, además de tocar la batería, canta. O más bien se ahoga, en el sentido de que se deja los intestinos y las cuerdas vocales en el intento.

Su pegada con las baquetas es tan precisa y tan contundente que te deja boquiabierto tras unos cuantos ritmos tras los tambores.

Además de otro buen puñado de bandas y proyectos, el tipo también toca en CORPUS OFFAL, la banda que nos ocupa. Y empiezo por él porque me ha dejado tan impresionado oyendo su trabajo en este álbum debut que se merece empezar por él.

CORPUS OFFAL no dejan de ser otra banda más del típico Death Metal mezclado con espeso Doom al que nos tiene acostumbrados las escenas americana y europea.

Ya sabes a qué me refiero, ritmos intensos, cavernosos, brutales en su intensidad y no aptos para débiles de espíritu. Aquí no hay velocidades de vértigo ni partes Grind ni nada. Aquí hay pesadez bien construida y perfectamente ejecutada, ritmos agónicos e intensos que no fan tregua l oyente. Y en La construcción de estos 6 temas, el curro de Jesse a la batería es tan importante que sin él, esto no sería nada más que otro disco más de Death Metal.

Tras Jesse, destacó en las guitarras a Clyle Lindstrom (proveniente de CEREBRAL ROT, CAUSTIC WOUND o FETID) y a Ian Schwab (al loro con su currículum: DEMONCY, CEREBRAL ROT, EXCARNATED ENTITY o CRURIFRAGIUM, entre otros). Ambos se ponen a encajar medios tiempos absolutamente devastadores, punteos y riffs vertiginosos, que en ocasiones se asoman a MORBID ANGEL, y como consecuencia, el muro de sonido es tan apabullante que asusta.

Las voces las mete el último de ellos, Ian, y lo cierto es que son guturales ligeramente entendibles, pero aún así provenientes de lo más profundo de su esófago. Me recuerdan bastante a CEREBRAL ROT y a FETID, y es que se nota la influencia de ambos en CORPUS OFFAL.

Como punto culminate de esta monstruosidad del álbum debut, tenemos a Jason Sachs al bajo, un músico que proviene de los blackmetaleros DEMONCY, un tío versátil que en este grupo y disco que comento se deja llevar por la oscuridad y la brutalidad con algunos ritmos absolutamente pesados y potentes, para cubrir las baterías de Jesse.

Sobre influencias, lo cierto es que si coges a todos los grupos a los que pertenecen, te puede dar una idea de por dónde van los tiros en este disco de estreno. Y añado a ABHORRENCE y a DEMILICH en este delicioso pastel que se han currado y que ha editado 20 Buck Spin (mala distribución en Europa… pero yo haría lo posible por conseguir este pedrusco).

Excelente ejemplo que demuestra que cuando juntas a buenos músicos involucrados en la escena, te sale algo tan excepcional como este disco debut. A por él, no hay excusa.