[CRÍTICAS] AXEL RUDI PELL (DEU) «Game of sins» CD 2016 (SPV Steamhammer)
Por: Héctor Lorenzo
El nuevo disco de AXEL RUDI PELL ya lo tenemos con nosotros, antes de su salida prevista para Enero de 2016, demostrando que Necromance Magazine continúa creciendo a pasos agigantados día tras día. Se trata del decimosexto trabajo en estudio de este virtuoso alemán de las seis cuerdas, aunque si tenemos en cuenta sus discos de baladas, directos, recopilatorios, best of… nos vamos a mas de 30 discos!! Toda una trayectoria en el mundo del metal que le ha servido para ganarse el reconocimiento de un público cada vez más amplio.
Este trabajo viene con una portada decente, una carta de poker que explota en llamas con un joker cadavérico burlón y siniestro. No me parece para nada de las mejores de su discografía, prefiriendo el estilo y diseño que presentaban las portadas de sus discos «Oceans of Time», «Kings and Queens», o el «Circle of the Oath», mucho mas épicas y elaboradas.
El disco se inicia con una intro titulada «Lenta Fortuna» (mala suerte en latín), de esas intro que realmente no aportan nada en el global del trabajo, Un minuto y medio que guarda correlación con la portada de este trabajo, con unos sonidos iniciales de un acordeón que me hace recordar a un día de feria, o en un parque de atracciones, para pasar rápidamente a unos teclados más oscuros con una risa maléfica que da el pistoletazo de salida a este trabajo.
«Fire» nos enseña la cara más conocida de AXEL RUDI PELL, guitarras con una distorsión muy clásica, con la voz de Johny Gioeli a un nivel increíble, muy melódica y con un timbre con registros muy altos y poderosos. Todo un cañonazo de hard rock- heavy metal melódico. Siempre me pareció que AXEL RUDI PELL sufrió la fastidiosa suerte de compartir comparaciones odiosas con YNGWIE MALMSTEEN y por desgracia no salió bien parado de la misma, aunque con el tiempo creo que no es correcto comparar a ambas figuras de la guitarra. AXEL RUDI PELL no es un guitarra que busca el virtuosismo y el derroche de técnica y estilo por lucimiento personal, creo que es un guitarra más enfocado a sonar como banda, como grupo, y no centrarse tanto en el protagonismo personal, aunque obviamente está sobrado de recursos en las seis cuerdas. Un gran tema para iniciar el disco, un estribillo típico de los tema de AXEL, no podía ser de otra forma.
Continuamos con «Sons in the night» uno de los cortes que más me ha convencido de este trabajo, llevándome a finales de los 90, toda una atmósfera de metal de botas y chupas de cuero con flecos. Siempre diré que AXEL RUDI PELL ganaría muchísimo acelerando un poco el tempo de sus temas, pero vaya, hay que reconocer que entonces no serían ellos mismos, jeje. El bajo de Volker Krawczak cumple a la perfección como «empaste» de todos los demás instrumentos, creando una base sólida en la que se apoyan los riffs de guitarra de Axel, nada complejos ni rebuscados y aún así muy coherentes con lo que pide el tema en cada momento. Gran solo de Axel en este tema, con mucha melodía y presencia. Esta claro que tras 16 discos de estudio tienen un sonido más que pulido y lo mantienen a lo largo de toda su carrera, estando ahora en un momento de mayor madurez y solidez como banda.
«Game of Sins» es el tema que da título a este nuevo disco, apareciendo por primera vez en este trabajo acordes de guitarras limpias y acústicas, junto a unos coros de teclado que dan paso a un riff que podría haber suscrito el bueno de Tony Iommi sin duda, pero no, no es un tema a lo Sabbath, se queda sólo en ese riff inicial. El estribillo apodera rápidamente al oyente, luciendo Johny Gioeli en todo su esplendor, increíble voz. Un medio tiempo con una base muy repetida, una estructura sencilla que da todo el protagonismo al increíble estribillo de la canción.
Para mi regozijo subimos revoluciones con «Falling Star», un tema más rápido, con más chicha. Me ha llamado la atención el tipo de distorsión que usa Axel en este disco, aunque no entiendo mucho de drivers, chorus y demás efectos que tanto gustan a los seis cuerdas, sí que he notado que está muy trabajada, dándole un toque más personal al sonido final general del disco. De nuevo el estribillo es la base del tema, la parte mas álgida de la canción. Otro tema muy AXEL RUDI PELL, sin duda, con otro de los mejores solos de todo el disco. Lo dicho, Axel no es un guitarra que busque enseñarte velocidad, escalas a mil, tappings, bendings y demás parafernalia, es un guitarra con gusto, y esto ya es decir mucho, que antepone la canción y el resultado final del tema a su propio protagonismo.
«Lost in love» vuelve de nuevo a empezar con esos teclados a modo de coro que ya resultan cansinos de tanto abuso. Un tema más tranquillo, donde la voz de Johny luce de nuevo en lo más alto. Como no podía faltar en cada disco de AXEL RUDI PELL, se trata de una balada de muy alto calibre. Como punto negativo comentar que quizás este tipo de metal y este disco en concreto no creo que enganche y funcione con las nuevas generaciones, que buscan más potencia, rabia, rapidez… pero estoy seguro que para los puretillas del metal que buscan, de vez en cuando, algo más tranquilo este disco es un gran acierto.
«The Kings of fools» es el siguiente tema, que comparte título con uno de los grandes hits de EDGUY. En la misma línea de los anteriores cortes, una batería y bajo muy limpios y neutros que dan soporte para que la guitarra de Axel brille pero sin recargos innecesarios, y con una voz protagonista absoluta de toda la canción. ¿Puede aburrir llegado a este punto el disco? Ummm puede ser, demasiados cortes iguales, pocos sobresaltos, pocas novedades. Quizás esperaba algo mas de velocidad en algunos temas, algunos contraste a lo largo del disco.
«Till the world says goodbye» arranca con la marca de la casa, un riff en bucle que te sumerge en una espiral musical. Con un tempo más lento y pesado va avanzando hasta llegar a un estribillo muy melódico, que al igual que los cortes anteriores se convierte en el fuerte de dichas composiciones.
El disco termina con «Breaking the rules», un tema más animado y directo y «Forever free» donde los teclados vuelve a llenar todo el espacio, un tema de 8 minutos y medio que se me ha hecho muy largo.
Como último regalo nos viene un bonus del tema «All along the watchtower», una cover del clásico de JIMI HENDRIX que queda realmente bien.
A favor, AXEL RUDI PELL en toda su esencia, aprovechando su madurez como banda y como músicos, con una producción exquisita, temas compuestos para brillar en su conjunto, con un trabajo vocal inmejorable. En contra, el disco se puede hacer un poco largo, no esperes cambios ni sorpresas. Un buen disco de hand-rock- heavy metal para disfrutar en la barra de un bar o sentado en el sillón de casa.