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Por: Juan Angel Martos
Desde la Costa del Sol, nos llega el último trabajo de los malagueños CHAOS BEFORE GEA que con su segundo LP “Kharon”, tras un primer álbum, “Erebo”, ya de por si muy bueno, han dado un salto de calidad, tanto en la composición como en las estructuras musicales de cada tema, en su temática, contundencia…estos chicos han hecho un discazo.
Definir su sonido es complicado, porque poseen muchas influencias de estilos, toques groove por doquier, ritmos del metalcore machacones, orquestaciones que ponen el toque épico en sus composiciones, cambios de ritmos constantes acercándoles al progresivo, toques deathcore/black en algunas voces, post rock y como no, un aire andaluz recorren sus temas con algunas melodías y toque en la voz melódica que recuerdan sus raíces. Un conglomerado de estilos diferentes que han sabido hilar con maestría, cada tema suena distinto al anterior, pero unidos por un hilo conductor que los une en un bloque, un gran trabajo.
Disco grabado en Wave Nation, en Ronda, por estos cinco chavales: Ismael Pérez (voces), David Arroyo (batería y coros), Adrian López (guitarra y coros), David Martin (guitarra) y Damián Schmitt (bajo). Además han entrado a formar parte de Blood Fire Death, promotora que siempre apoya a la escena underground (debería haber más gente que trabaje como ellos, un diez). Cuentan con un artwork muy guapo, realizado por Alejandro Olmedo Nieto, guardando el concepto del disco, representado a Caronte mientras cruza el rio de las almas.
Ocho temas son los que cuenta el LP, cada uno diferente entre sí pero formando un bloque contundente, “In Death” abre del disco de forma magistral, haciéndonos una idea de lo que nos espera, toques progresivos, melodías vocálicas muy variadas…, un proyecto muy personal, que es lo que lo hace distinto a los demás grupos. Con “ Moaning in Agony”, nos presenta otra canción totalmente distinta con unos guturales brutales, partes de inspiración blacker y death, para sumergirnos a final de la mezcla en un toque andaluz quedando patente las raíces del grupo con toques de flamenco y arabescos.
“Kharon”, tema homónimo al nombre del disco, mantienen su odisea personal, con toques más oscuros, manteniendo un gran proceso compositivo, con toques sinfónicos y progresivos, con unas melodías limpias mezcladas con unos guturales que parecen salidos del averno. Seguimos el viaje de las almas con la desgarradora “The Voice”, con toques math metal convirtiendo en paranoia colectiva en un sinfín de aceleraciones histéricas y melodías reflexivas, a lo DILLINGER ESCAPE PLAN. “Erebo, chosen as the nemesis for the human race”, ¿un recuerdo a su anterior álbum?
Con “Times Stands Still”, sobrepasamos el ecuador del disco, toques grooves (LAMB OF GOD) entrelazado con unas melodías preciosistas a guiadas por la voz limpia de Ismael. Una cosa de la que te das cuenta a estas alturas, es que todos los temas tienen un hilo conductor muy sinuoso, que te mantiene en vilo durante cada una de sus escuchas porque no sabes por dónde va a tirar el corte, para rematarlo con unos finales apoteósicos, como si de capítulos de libro se tratasen.
“A New Mankind” y “March Forth”, vuelven a entremezclas los elementos progresivos, grooveros con toques death y estrofas muy melódicas a la vez que contundentes. Con cada tema te das cuenta del trabajazo que tiene este “Kharon”, siendo una apuesta difícil a llevar al directo, el cual estoy deseando de ver.
El punto final lo pone “Red Lights”, como si de unos AMON AMARTH progresivos se tratasen, tema muy épico propiciado por los samples y voces corales, acrecientan en una vorágine sinfónica perfecta para poner el punto y final a este pedazo de trabajo.
En resumen, un gran trabajo de estos chicos malagueños, mostrando la calidad nacional y andaluza, y haciéndonos olvidar la música internacional por momentos. Un perfecto trabajo de estudio, adquiriendo una mayor madurez y contundencia en su sonido con respecto a su debut “Erebo”, tratando cada tema como único pero en un bloque conceptual dirigidos por Caronte.
