DERIVA (ESP) «Deriva» CD 2016 (Autoeditado)
Por Nacho Peña
Aún llegan CDs, de vez en cuando, a la redacción procedentes del pasado 2016. Trabajos con mucho que decir, con algo especial entre sus melodías y que merecen ser contados y hablar de ellos, a pesar de no tratarse de novedades o CDs por salir. Este es el caso del debut CD de los Madrileños DERIVA. Un LP Autoproducido por la banda, donde nos dan una tarjeta de presentación por encima de la media y que, de seguro, los va a situar bastante arriba a poco que se den a conocer por los escenarios del país.
Lo que tenemos aquí son 44 minutos repartidos en 8 cortes de pura magia instrumental, donde múltiples influencias, tanto del Rock como del Metal, se dan la mano y se amenizan con retales de Jazz y de pura imaginación, para construir una suerte de pasaje a través de la mente o, como ellos dicen, habitar el edén suicida de la razón.
Cada tema tiene por título algo relacionado con el cerebro, ya bien sea una parte del mismo, algo atribuible a su funcionamiento o bien uno de los neurotransmisores presentes entre sus conexiones sinápticas.
Como banda instrumental, tenemos que hablar que brillan con luz propia y no es necesario tirar de manual y mencionar otras bandas que, a priori, nos podrían parecer similares.
Todo lo contrario, DERIVA nos proponen estructuras complejas, bonitas, intensas y emocionantes pero desde una perspectiva diferente. Tal es así, que son capaces de abrir un tema con palmas. Si palmas. Es lo que escuchamos en esa locura que es “Thalamus”. U ofrecernos un viaje lisérgico y relajante en “Cortex”.
Canciones todas ellas muy elaboradas, con subidas y bajadas, que parece que estén contándonos algo a través de los acordes, los ritmos, los punteos, los arpegios y los múltiples arreglos que atesoran.
Lo fácil sería que os hablase de Post-Rock o Post-Metal, pero esta gente va un paso más allá, ofreciendo algo más. Eso algo más es, sin duda, una serie de emociones que sus integrantes son capaces de transmitir a través de sus instrumentos y que hacen prescindible la existencia de una voz.
Una producción clara, una ejecución precisa, y tenemos un CD que se escucha con gusto y que entra bien a la primera.
A todo ello hay que añadir una portada que, particularmente, la encuentro elegante y bonita. Algo con estilo dentro de su minimalismo, que representa bastante bien la clase de sus músicos.
Un disco donde se dan la mano con tanta facilidad el Rock, el Metal y el Jazz, incluso en ocasiones el Pop, siempre supone un soplo de aire fresco dentro de la escena musical que vivimos y los más abiertos de mente sabrán apreciar, desde los primeros acordes, la buena labor que hay detrás de este trabajo.
Para disfrutar sin prisas en una noche de verano.