NUMEN (ESP) – Iluntasuna besarkatu nuen betiko – CD 2019 (Les acteus de L’ombre productions)

Existe un video que podéis localizar en Youtube donde se demuestra que el euskera es una de las lenguas más bonitas del mundo. De entre mis palabras favoritas está otsaila, que corresponde al mes de febrero, pero que puede traducirse como “el mes del lobo”, debido a que es en ese mes cuando el guardián del bosque tiene el celo y los montes se llenan con sus aullidos. A pesar de su aparente aspereza, con sus “kas” y sus “tx”, el euskara es una lengua muy poética. ¡Colorea y aprende con Teo!

Pues NUMEN llevan en esto veinte años y utilizando su propia lengua vernácula lo que les confiere un puntazo diferenciador. No obstante, no esperéis encontrar aquí el uso de instrumentos autóctonos como puedan ser la alboka o la txalaparta (lo que habría sido otro puntazo) porque salvo en el último tema “Itzaltzuko Bardoari” (“El bardo sombrío” si al traductor de Google no se le ha ido mucho la pinza), donde si aparece lo acústico y los instrumentos de viento y el recitativo, el resto de este disco es agresión pura y dura.

Para este “Iluntasuna besarkatu nuen betiko”, los chicos de Mondragón se han desembarazado de cualquier artificio y, parece ser que han decidido dar un magisterio de lo que es el Black Metal. Porque abrir con un trallazo como “Iluntasuna Soilik” tiene pelotas. Continúan con uno de los temas que más redondos les ha quedado y es “Lautada Izoztuetan”, con toneladas de riffs de calidad y multiples cambios, así como melodías para recordar… De nuevo, si al traductor de Google no se le ha ido la pinza, se traduce como “En la llanura congelada” y es la sensación que transmite: un “Freezing Moon” de los MAYHEM pero situado en Udalaitz. Ocho minutos, casi nueve, que dejan a los noruegos con un palmo de narices. Siempre se habla de lo fanfarrones que son los vascos, pero es que con temas como este, la gente de NUMEN puede fardar ante quien quiera.

“Pairamena” demuestra un soberbio trabajo de blast-beats de Eihar, así como destreza en combinar distintos ritmos, y con una banda que le sigue creando una atmósfera asfixiante (¡madre mía, la garganta de Aritz!). Pero si pensabais que habíais sobrevivido a la tormenta, llega “Behin Hilko Naiz” y la banda vuelve a demostrar maestría fuera de toda catalogación o valoración, los vocales se vuelven más oscuros y sientes un escalofrío recorrer tu espina dorsal con ese riff principal. ¿Y qué decir de “Nire Arnasean Biziko Da Gaua”? Crudo, seco, gélido, un viaje en el tiempo y en el espacio. Un tema que, en su parte central, se pone interesante y rebaja momentáneamente la agresión y deja entrever armonías evocadoras, aunque cuando las guitarras empiezan a tirar de palanca de tremolo, la cosa se pone realmente seria.

“Itzaletan Solasean” sí tiene esos momentos más calmados, el tema se queda a la deriva con una sencilla guitarra para adormecerte y engancharte. ¿Bien, te vas quedando dormido? Pues “Iraganeko Errautsak” entra como tiene que entrar, como un aizkolari trabajando a plena potencia y velocidad.

El nuevo trabajo de NUMEN es un trallazo de Black Metal en toda regla; como tiene que ser, crudo, descarnado, agresivo, con algún matiz más melódico y quitando casi todo el componente folkie salvo algún retazo. De todos modos, “Iluntasuna besarkatu nuen betiko”, como cualquier lanzamiento de esta banda, es un regalo anticipado del olentzero.

[Review: Cesar Luis Morales]