Por Lluís Garcia Sola
Los japoneses VAMPS acaban de lanzar su quinto álbum de estudio, este notable “Underworld”, que eleva su música un paso más allá de la obvia influencia nipona, para occidentalizar su sonido definitivamente. Quizás muchos de vosotros, especialmente las más afines al J-Rock, conozcáis al vocalista Hyde y al guitarrista K.A.Z de sus anteriores bandas, L’Arc-en-Ciel y Oblivion Dust, respectivamente. Pero no os dejéis engañar, aquí lo que encontraréis va a ser un Rock Alternativo y Modern Metal que recoge muchas de las influencias que han ido adquiriendo estos últimos años compartiendo escenarios con nombres como SIXX: A.M., IN THIS MOMENT o APOCALYPYICA.
Arranca el álbum con el tema que le da título, “Underworld”, toda una invitación a ese mundo oscuro, gótico e industrial que nos propone el dúo amante de lo vampírico. Un tema muy americano, con los omnipresentes teclados de Jin poniendo color a un tema que habría firmado el mismo ROB ZOMBIE. En “Calling” nos apartamos tímidamente de la tiniebla para acercarnos a unos pasajes más melódicos y pegadizos, especialmente en su estribillo, con una influencia más rockera y clásica. Lógico que la hayan elegido como uno de los singles. Sin embargo en “Break Free” tiran por un patrón más genérico, coqueteando con las tendencias más electrónicas. “Don’t Hold Back” vuelve a retomar su faceta más melódica, en la que si se respira cierto aura japonés en sus versos, para culminar en un estribillo más propio del Nu Metal.
“Bleed for Me” suena al mejor MARILYN MANSON, tanto en su composición como en su ejecución, mostrándonos el lado más oscuro, macabro y vampírico de los nipones. Firman la emotiva power ballad del disco con “In This Hell”, uno de los momentos más álgidos y emotivos del mismo, en el que la voz de Hyde brilla con luz propia al son de los riffs y melodías de K.A.Z. Eso sí, quizás mi corte favorito llegue con “Inside of Me”, un rotundo single, que contiene todos los ingredientes para convertirle en todo un himno para el grupo. La pegada rítmica del bajo de Ju-ken y la batería de Arimatsu, un estribillo peligrosamente adictivo, unos arreglos instrumentales a la altura, y la inestimable colaboración de Chris Motionless, conocido por su banda MOTIONLESS IN WHITE. Un caballo ganador.
Vamos adentrándonos en el sprint final del trabajo con la efectiva “Rise or Die”, que cuenta con la aparición de Richard Z. Krupse de RAMMSTEIN/EMIGRATE y desprende un elegante a la par que macarra Hard Rock más propio de los vampiros de Helsinki que el de los originales de Tokyo. Sí, hablamos de THE 69 EYES. Hyde se rodea de un poderoso halo instrumental en “Sin in Justice”, gentileza de los excelentes músicos de APOCALYPYICA, quienes solo podrían formar parte de un corte de estas características. Se empeñan en volver a hacernos bailar al son que marca “B.Y.O.B (Bring Your Own Blood)”, una composición que bebe directamente del Metal Industrial y que parece sentarles especialmente bien a la banda. Se despiden con “Rise Up”, otro cañonazo que juega entre los entresijos del Hard Rock y el Modern Metal, según se mueva entre los versos o el estribillo. Un acertado broche final para “Underworld”, el nuevo trabajo de VAMPS diseñado para expandirse fácilmente en el territorio europeo y, sobretodo, norteamericano. Razones no le faltan.
