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Por: Carlos Bermejo
Después de un parón de casi diez años, el combo germano formado en 1996 OUR SOULS, volvieron a la carga con un EP en 2013 y ahora, con este “The Beast Within” que nos ocupa.
Este trabajo originariamente constaba de diez cortes, pero a la redacción de Necromance nos llega una versión extendida, publicada en este 2016, en la que incluyen tres temas de su EP anterior “War for Nothing” que eleva la duración total del álbum a algo más de cincuenta minutos de un Thrash Metal moderno en líneas generales pero cargado de Groove y sobre todo Hardcore, alejándose bastante del Crossover de sus comienzos allá por mediados de los noventa, algo que se refleja perfectamente tanto en la afinación grave de los instrumentos de cuerda, como en la tonalidad vocal de su nuevo frontman. El disco ha sido grabado, mezclado y producido por su baterista Michael Grunert en Grunhouse Studio, la masterización ha corrido a cargo de Jürgen Lusky en Hofa Studios (UNISONIC, AXXIS, THE RAZORBLADES,…). Para la portada del cd ha sido realizada en el estudio alemán Bloodboy (HEAVEN SHALL BURN, DYING FETUS, HAIL OF BULLETS,…), con un impresionante resultado final.
El trabajo comienza con “The Beast Within”, corte que da título al disco el cual es directo y rabioso, en el que se aglutinan todos los estilos referentes para la banda, sin dudas abren el disco de una manera magistral, no es casualidad que este fuera el tema que eligieron como adelanto, del cual colgaron un lyric video.
“Time is Up” es la siguiente, un corte que comienza con una sirena como si quisieran alertarnos de lo que nos espera, y no es otra cosa que una tremenda composición, en la que siguiendo con su propuesta anterior, hay que destacar las partes puramente Hardcore que hacen recordar a la banda de Jamey Jasta. “Zombie Nation” es una pista diseñada para no dejar prisioneros, un tema, corto, rápido y con rabia descomunal.
En “Age of Pestilence” y “I Am Alive” encontramos un par de cortes principalmente machacónes, en el que destaca la incursión de melodías y la participación crucial de Michael Grunert a la batería para que las canciones no decaigan en intensidad. La siguiente “F-E-S-R” se podría incluir en las características de las dos anteriores, pero la colección de riffs que posee hace que destaque sobre ellas y me atrevería a decir que sobre el resto del álbum, lo que es seguro es que tiene el mejor estribillo del disco.
“No Surrender” comienza lenta y con un ritmo de batería jugando con los timbales para darle su correspondiente toque Hardcore, que se repetirán en varias fases del tema, en el que destaco lo melódico de los estribillos. Con un eructo comienza “Pornsuckers From Hell”, en este corte no hay mezclas de estilos, es un trallazo de Hardcore en toda la cara, en el que el protagonista es el bajo de Marcus “Linne” Lindemann.
Las dos últimas composiciones del disco son “Leave me Alone” y “Chemie der Verwesung”. La primera posee la calidad y agresividad mostrada durante el álbum, y la segunda que es con la que cierran este disco es un tema muy atmosférico en el que podemos oír una voz narrando una historia. En esta versión extendida encontramos los temas “War for Nothing”, “The Reaper” y “To Serve a God”, que como dije al inicio pertenecen a su EP anterior y en los que se observan además de la diferencia en la calidad de sonido, la mejora en la parte compositiva de la banda.
